Poco ritmo es la mejor manera para definir el inicio del encuentro. Tan solo un acercamiento de Coquelin, hoy con una máscara tras su rotura de nariz ante el Everton, a pase de Giroud y el disparo de Austin para los locales fue el único peligro en los primeros minutos. Aunque quizá se puede añadir el tímido centro de Bellerín que atrapó fácil Green.

Ninguno era capaz de hilvanar apenas una jugada de más de tres toques. Los centros por la banda izquierda de Gibbs y Hoilett no surtían efecto porque rebotaban o eran cazados por el meta. El único peligro se vislumbró ante el disparo de Zamora a Ospina, pero este lo atrapó de forma fácil.

El planteamiento del Queens Park Rangers consistió en buscar resquicios en la defensa gunner presionando muy arriba la salida de balón para que no pudiesen conectar con los hombres de arriba ni atravesar la primera línea defensiva. Y esto lo notaba el Arsenal. Cazorla en el centro del eje, con Rosický de interior derecho como manejador y Özil en la mediapunta para conectar no funcionaba.

Lo más peligroso, si existió esto en los primeros veinte minutos fue el disparo de Suk-Young que rebotó en el muslo de Mertesacker y acabó con la jugada. Ninguno era capaz de hilvanar algo más para inquietar a Ospina o a Green. Y la señal más clara de los problemas de los gunners era su incapacidad para sacar el balón jugado desde atrás.

No obstante, los defensas centrales tenían dificultades para marcar a dos hombres de gran envergadura como Zamora y Austin. Y la defensa lo pagó, aunque el disparo de Austin fue directo a las manos de Ospina. Y en el contraataque, Giroud provocó que Green tuviese que lanzarse por primera vez en el encuentro.

Pero la situación empezó a revertirse con el Arsenal atrasando la línea de presión de sus rivales y buscando resquicios en la muralla de los hoops. La clara seña de este hecho es que, por fin, se veía tocar la pelota a Özil, con Cazorla y Rosický intentando ejercer el mando sobre el centro del campo.

Más peligro efectivo

La ocasión de mayor peligro en este primer tiempo llegó de un centro de Philips desde la esquina izquierda del área, al que no llegó ninguno de los atacantes del Queens Park Rangers, y Ospina tuvo que lanzarse para despejar. Mientras tanto, las asistencias tuvieron que entrar para atender a Gabriel Paulista. El brasileño abandonó el terreno de juego y su lugar lo ocupó Laurent Koscielny.

Y, de nuevo, el Arsenal empezaba a perder el control de nuevo a favor de su rival. El mejor exponente, y único, de este hecho fue la espectacular volea de Charlie Austin desde veinticinco metros que se marchó por la línea de fondo, acariciando el poste derecho de la portería de Ospina.

Las asistencias debieron hacer acto de nuevo por un choque entre las cabezas de Caulker y Onouha. El segundo fue el peor parado con un brecha en el pómulo izquierdo que le obligó a abandonar el campo. Hill fue el escogido por Ramsey para sustituir el británico.

El partido parecía abocado a marcharse al descanso sin ninguna ocasión más de peligro, ante la monotonía de esta primera parte. Pero Santiago Cazorla no estaba de acuerdo con esto. El español comenzó a conectar con Alexis y Giroud hasta que una volea, rematada a duras penas, obligó a estirarse a Green para salvar su portería del primer gol gunner.

Rosický celebra con Giroud el gol del francés. | Imagen: Arsenal.

Arsenal al ataque

La segunda parte tuvo un inició con mucho más peligro en el área de los hoops. Rosický consiguió marcharse de Suk-Young por velocidad y servir un pase complicado a Özil que no pudo enganchar bien con el pie; Sánchez lo recogió e intentó batir a Green, pero despejó a córner.

Este comienzo fue un monólogo del Arsenal. La mala e inactiva primera parte de Alexis cambió. El chileno se mostró muy activo tanto para combinar la pelota como para recibirla, aunque la defensa del Queens Park Rangers no le dejase disparar. Además, el balón empezaba a llegarle a Özil, quien lo distribuyó correctamente.

El segundo de Ramsey, y probablemente el propio técnico vio como estaba siendo superado por el Arsenal. El flojo partido de Sandro fue condicionante suficiente para mandarlo al banquillo y que Krancjar ocupase su puesto en la medular. Pero este no resolvió nada en el esquema de creación del técnico inglés.

Las ocasiones de peligro del Arsenal se diluía conforme su rival estaba mejor asentado en defensa y cerraba toda posibilidad de encontrar un resquicio en la defensa. Esto coincide con la falta de disparos lejanos de los gunners, al contrario que los hoops que eran prácticamente su única arma para inquietar a Ospina.

Alexis celebra su espectacular gol en Loftus Road. | Imagen: Arsenal.

Alexis vuelve a brillar

No obstante, y mediante un arma poco común en los hombres de Wenger, un contraataque acabó con un tanto más en el casillero de Giroud y el primer cambio en el luminoso de Loftus Road. El contraataque iniciado magistralmente por Cazorla, fue secundado por Özil para encontrar a Sánchez que, arrastrando a la defensa, creó un hueco por la banda izquierda para que lo aprovechase Gibbs, pero Caulker dejó el balón muerto y Giroud, desde el suelo, no dudó en convertirlo en gol.

El ánimo subió en el Arsenal que empezó a atacar con mayor asiduidad el área de Green con Alexis Sánchez como su mejor exponente. Y esto se reflejó el espectacular gol de Alexis Sánchez. Özil le sirve un balón bombeado a la banda, el chileno lo cede a Gibbs, que se la devuelve para que ante la presión de Caulker, Furlong y Hill perfore la meta de Green.

El Queens Park Rangers estaba abatido. Incapaces de crear peligro, estaban siendo superados claramente por el Arsenal. Además, Alexis Sánchez parecía el mismo del principio de la temporada que sembró el caos en las defensas rivales, como demostró que sea el máximo artillero de los gunners en la Premier League.

Las ocasiones se sucedieron entre todos los hombres de ataque el equipo de Arsène Wenger. Sánchez, Rosický, Giroud y Özil eran un quebradero de cabeza para la defensa, que era incapaz de frenarlos. Y para colmo, en ataque eran imprecisos, lentos y poco creativos.

Aunque esto se acabó de un plumazo cuando Koscielny y Gibbs dejaron espacio para Charlie Austin, que demostró su gran pegada y por qué es el máximo goleador del conjunto londinense. El delantero inglés recibió al borde del área, se dio la vuelta y con un potente disparo pegado al palo batió a Ospina.

La gran noticia del partido es la vuelta del mejor interior derecho del equipo de Wenger: Aaron Ramsey. Tomas Rosický fue el elegido por el técnico francés para que ocupase su sitio Ramsey. El galés gozó de los últimos siete minutos de juego para recuperar el ritmo de competión.

Con esta nueva victoria, los gunners se afianzan en la tercera plaza, intentando alcanzar al segundo clasificado, el Manchester City. Todos los rivales por detrás en la lucha por los puestos de Liga de Campeones han conseguido la victoria, por lo que el Arsenal haya hecho lo mismo, les deja en la misma situación que la pasada jornada. Solo quedan diez jornadas para acabar la liga.

Puntuaciones VAVEL Premier League

QUEENS PARK RANGERS (1) (2) ARSENAL
GREEN 7 OSPINA 6
FURLONG 4 BELLERÍN 5
CAULKER 4 MERTESACKER 5
(45') ONOUHA 5 (36') GABRIEL 6
SUK-YOUNG 5 GIBBS 6
PHILLIPS 6 COQUELIN 6
(56')SANDRO 4 CAZORLA 7
HENRY 5 (87') ROSICKÝ 6
(73') HOILETT 5 (93') ÖZIL 7
(82') AUSTIN 7 (64') GIROUD 7
ZAMORA 6 (70') SÁNCHEZ 8
Suplentes
HILL (45') 4 KOSCIELNY (36') 4
KRANJCAR (56') 4 RAMSEY (87') -
ISLA (73') 4 WELBECK (93') -