Gomis se basta para batir al Aston Villa

Intensidad desde el primer minuto. Eso es lo que pedía Monk en la banda desde el inicio del encuentro a sus futbolistas. La intensidad del conjunto visitante fue la dinámica del encuentro, donde su dominio se magnificó en acciones peligrosas que obligó a la defensa villana a tener trabajo desde el primer segundo de choque.

Una intensidad que entendió a las mil maravillas, Gomis. El delantero fue el futbolista más activo de los visitantes y estuvo en cada jugada de peligro de éstos. El jugador francés obligó a Sherwood a tener un marcaje específico sobre él. Una labor que tuvo que realizar Clark durante los minutos de mayor pegada de los cisnes. Sin embargo, los cancerberos todavía no habían tenido necesidad de entrar en contacto con el esférico, sobre todo, Guzan que no había recibido ningún tiro pese al claro dominio del Swansea.

Sherwood que vería como Cleverley tenía que abandonar el terreno de juego por una lesión muscular

El propio Gomis sería el encargado de realizar el primer disparo entre los tres palos. El delantero encontró hueco dentro del área para acomodarse el balón y disparar obligando a Guzan a intervenir con una estirada a ras de suelo. Las malas noticias se acumularían para Sherwood que vería como Cleverley tenía que abandonar el terreno de juego por una lesión muscular. En su lugar entraba Carlos Sánchez.

El dominio de los galeses se hacía más intenso cada minuto que pasaba. Ello obligó a los defensores a tener que detener el ritmo del partido con continuas faltas. Con tanta interrupción poco daría de juego vistoso el choque en sus últimos instantes de primer tiempo. Routledge intentó sorprender a Guzan con un tiro desde la frontal, tras un rebote, que dio en Okore y se marchó fuera.

La dinámica en el inicio del segundo tiempo no varió, ya que los visitantes salieron con la misma intensidad que durante los primeros cuarenta y cinco minutos, sobre todo, con jugadas a balón parada donde Sigurdsson, encargado de ejecutar todos las jugadas a balón parado del Swansea. No obstante, la zaga local estuvo a un gran nivel y consiguió evadir el peligro y comenzar a desesperar a los futbolistas del Swansea.

A pesar del dominio total de los galeses, el Aston Villa tuvo la primera gran ocasión del segundo tiempo. Agbonlahor, hombre más en forma del conjunto de Birmingham, encontró un espacio entre los defensores para recibir el pase, aunque demoró en su tiro y le dio la opción a Fede Fernández de bloquear el lanzamiento. Se lamentaba Sherwood en el banquillo por la ocasión desperdiciaba en un choque que estaba siendo difícil de manejar para el técnico. El equipo de West Midlands volvió a tener una buena ocasión con un cabezazo de Okore que se marchaba alto. Empezaba a anirmarse la afición de Villa Park tras una primera parte terrible de los locales.

Tras un parón de verticalidad y polivalencia, el Swansea volvió a imponer un ritmo alto que no conseguía dominar el Aston Villa. Gomis, una vez más, logró internarse con facilidad al área y, como le sucedió a Agbonlahor, tardó en decidirse y le blindó a Clark el momento de hacer un corte y despejar el peligro. Monk dio entrada a Jefferson Montero para tener mayor velocidad en las bandas ante la gran murallas que había en la zona central.

El interior ecuatoriano sería la solución para tirar abajo el planteamiento táctico de Tim Sherwood

El interior ecuatoriano sería la solución para tirar abajo el planteamiento táctico de Tim Sherwood. El jugador envío un pase preciso a Gomis para que éste batiera a Guzan. Tras un gran encuentro y varias ocasiones, el delantero francés conseguía su recompensa en forma de gol. Un gol que daba tres puntos valiosos a los hombres de Monk ante un Aston Villa que no mostró el potencial de las últimas jornadas.

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