Una pequeña y gris ciudad en el condado de Lancashire, sin demasiadas cosas interesantes que ver o hacer, mantiene las esperanzas de que su humilde equipo consiga permanecer en la máxima competición del fútbol inglés durante, al menos, una temporada más. Es Burnley, es su gente, es el Burnley FC, es Turf Moor cantando hasta quedar sin aliento, son los clarets, es Sean Dyche ordenando su ejército, Kieran Trippier subiendo la banda, George Boyd peleando cada balón y Danny Ings machacando redes rivales.

El objetivo está claro: la salvación. El modus operandi también: unión, trabajo, orden, disciplina y fe en el mando. A día de hoy, a falta de ocho jornadas que serán ocho dramáticas finales, el Burnley está en puestos de descenso. Décimo-octavo, con 25 puntos, a uno del Sunderland y tres del Aston Villa y el Hull City. Sólo tres equipos llevan peor racha en las últimas cinco jornadas. Son el colista Leicester City, el penúltimo Queens Park Rangers y el décimo-séptimo Sunderland.

En estas últimas cinco jornadas, los chicos de Sean Dyche han cosechado un empate, tres derrotas y una victoria. Lograron sacar un punto del campo más complicado de toda la Premier, Stamford Bridge, donde empataron a uno contra el líder de la competición, el Chelsea. Perdieron en Turf Moor contra el Swansea y en Anfield ante el Liverpool antes de recibir al segundo clasificado, el Manchester City, en casa. Un solitario gol de George Boyd y 90 minutos de esfuerzo colectivo sirvieron para doblegar a los skyblue y dar aire a un equipo que necesitaba sumar de forma urgente. En la siguiente jornada, la última hasta el momento, el Burnley sucumbía (2-0) en St Marys Stadium ante el Southampton de Koeman.

Para lograr su objetivo, el Burnley debe afrontar los ocho partidos que restan como auténticas finales y con el cuchillo entre los dientes. Estas son sus finales.

Burnley - Tottenham Hotspur

El primero de los enfrentamientos será en casa ante los spurs. En plena batalla por los puestos europeos y con un Harry Kane en estado de gracia, los de Pochettino serán un hueso duro de roer. En las últimas jornadas el Tottenham se está mostrando un tanto irregular. Capaz de ceder un empate en casa ante el West Ham, de recibir una goleada en Old Trafford por parte del Manchester United o de sufrir lo indecible para vencer al Leicester City en White Hart Lane. Las tres últimas victorias de los spurs han sido por la mínima y recibiendo mínimo un gol en contra. Aun así, la calidad de sus jugadores y el pico de forma que atraviesa Kane hacen de este partido una prueba difícil de superar para el Burnley.

Burnley - Arsenal

Segundo partido consecutivo en casa, y segundo contra un equipo del norte de Londres. El Arsenal puede estar luchando incluso por la segunda plaza, si no, al menos lo estará haciendo por asegurar una plaza que dé acceso a Champions League. Volverá a ser un enfrentamiento muy difícil para un Burnley que intentará hacer valer el factor cancha para doblegar a los de Wenger. Los gunners llevan hasta la jornada 30 seis victorias consecutivas. Desde que perdieran en White Hart Lane en el derbi del norte de Londres, han ganado a Leicester, Crystal Palace, Everton, Queens Park Rangers, West Ham y Newcastle. ¿Será el Burnley capaz de vencer a uno de los equipos más en forma, si no el más, del campeonato? Una cosa es segura, los clarets se dejarán la piel en el intento.

Everton - Burnley

En la jornada 33, el Burnley visitará Goodison Park donde le esperará un Everton que, en una mala temporada, puede estar luchando todavía por escapar de las garras del descenso, aunque lo más seguro es que esté ya en la zona tranquila, sin demasiados objetivos más allá de agradar a su afición. Las dos victorias consecutivas ante el Newcastle y el QPR en las jornadas 29 y 30 hacen que los de Roberto Martínez respiren con más tranquilidad, pero según los resultados ante el Southampton y el Swansea pueden volver a verse inmersos en la agónica lucha de la permanencia o, al contrario, asentarse en la zona media, sin preocupaciones. Los clarets viajarán a Liverpool con la victoria entre ceja y ceja.

Burnley - Leicester City

Jornada 34, Turf Moor, final entre finales, enfrentamiento directo. Quien resulte perdedor de esta batalla puede estar firmando su sentencia de muerte. El Leicester no vence desde el 10 de enero, cuando firmó un 1-0 en casa frente al Aston Villa. Antes del trágico choque ante el Burnley, los foxes se enfrentarán al West Ham en el King Power Stadium, viajará a The Hawthorns para jugar contra el West Bromwich Albion y recibirán al Swansea en su feudo. Turf Moor se vestirá de gala, el drama se respirará en el ambiente y la tensión se podrá cortar en el aire con un cuchillo. Aún quedarán cuatro partidos tras este, pero puede ser uno de los más decisivos en las ocho finales del Burnley.

West Ham United - Burnley

En la recta final del campeonato, el Burnley visitará Upton Park y tratará de sacar algo positivo, que puede resultar clave en la lucha sin cuartel que estará disputando. Los hammers perdieron sus opciones de luchar por Europa, pero tampoco pasarán apuros para mantener la categoría. Están instalados en media tabla, sin preocupaciones ni demasiadas ambiciones. Querrán, eso sí, brindar una victoria a su fiel afición. Los de Allardyce fueron una de las sensaciones de la primera vuelta, pero en la segunda sólo han conseguido dos victorias por cuatro derrotas y cinco empates, resultados que han hecho que queden en tierra de nadie, sin opciones europeas ni agobios para la permanencia. El Burnley puede llegar con muchas urgencias al encuentro y será un partido dramático para ellos.

Hull City - Burnley

Antepenúltimo partido de liga y un nuevo enfrentamiento directo, esta vez fuera de casa, que puede resultar definitivo para quien pierda. El Hull, que ahora se encuentra tres puntos por encima del Burnley, se enfrentará al Swansea y al Southampton fuera de casa, al Liverpool en el KC Stadium, volverá a viajar para visitar al Crystal Palace y recibirá al Arsenal antes de este choque. Es un calendario complicado y puede estar todavía con el descenso acechando, por lo que el resultado de este partido se antoja vital para dilucidar las opciones de permanencia de unos y otros. Un Hull City que a día de hoy cosecha cuatro partidos consecutivos sin conocer la victoria, con derrotas ante Stoke y Chelsea y empates contra el Sunderland y el Leicester. Los de Sean Dyche estarán ante una de sus más dramáticas finales.

Burnley - Stoke City

Sólo quedarán dos partidos. Además, será el último en casa para el Burnley. Recibirá al Stoke City, otro de los moradores de la media tabla que a priori no se jugará nada, y habrá de hacer valer el factor cancha sí o sí. Ganar, ganar o ganar serán las tres opciones para los clarets. No valdrá otra cosa, no habrá negociación posible. Tienen, los de Sean Dyche, motivos para creer en la victoria pues en el precedente de la primera vuelta lograron vencer 1-2, consiguiendo una de las cinco victorias que llevan hasta la fecha, la única lejos de Turf Moor. Así pues, el Burnley se aferrará a este antecedente y al calor de su afición para buscar la victoria que tanto necesitará.

Aston Villa - Burnley

La última final. La definitiva. Ya no habrá escapatoria. Quizás el Burnley ya esté salvado, puede que ya esté descendido o que se lo juegue todo a la última carta en su visita a Villa Park. Lo mismo sucede con su rival, que hoy se encuentra tres puntos por encima del descenso y para entonces puede estar en cualquiera de las tres situaciones descritas. El calendario previo de los villanos es harto complicado. Dos partidos consecutivos lejos de Villa Park ante el Manchester United y el Tottenham, recibir al Queens Park Rangers en un enfrentamiento directo, visitar el Etihad Stadium para jugar contra el Manchester City, recibir al Everton y al West Ham y viajar a Southampton es todo lo que tendrá que afrontar el equipo de Tim Sherwood antes de recibir al de Sean Dyche.

Joe Cole celebra su tanto frente al Burnley en la primera vuelta. | Foto: Getty Images.

Ocho partidos, ocho finales, ocho posibles dramas, anheladas sonrisas y evitables lágrimas. Emoción y tensión aseguradas, no apto para cardiacos. Cuchillo entre los dientes para jugadores, cuerpo técnico y afición. Todos dispuestos a bajar al barro para pelear y apurar las opciones hasta el último suspiro. Burnley entera quiere seguir siendo ciudad Premier. Tomen asiento, el espectáculo está servido.