24 de mayo de 2009, Middlesbrough y West Ham United se enfrentan en Upton Park en la última jornada de la temporada 2008-2009. Los hammers, en una cómoda novena plaza, no se juegan más que el honor y mantener la posición –el Manchester City se encontraba un punto por detrás– o, si el Tottenham Hotspur caía y ellos ganaban y remontaban la diferencia de goles entre ambos, alcanzar el octavo escalón de la Premier League. En cambio, los pupilos de Gareth Southgate llegaban en decimonovena posición, a tres puntos de la salvación que marcaba el Hull City.

No dependían de sí mismos, pero si conseguían superar a los irons, el Hull City caía en su encuentro y perdían el golaveraje con los smoggies (en ese momento había 4 goles de ventaja para los tigers) y el Newcastle United no puntuaba, el milagro de la salvación sería una realidad.

En esa última fecha, cuando ya se atisbaba el verano en las islas, Hull City (0-1 frente al Manchester United) y Newcastle United (1-0 ante el Aston Villa) perdieron sus respectivos encuentros, por lo que una victoria por 4 goles o más en Upton Park hubiera supuesto la salvación de los norteños. Obviamente, no era una tarea fácil, y así lo corroboró el resultado final de un encuentro que se acabaron llevando los de la capital por 2-1 gracias a los tantos de Carlton Cole y de Junior Stanislas, que hicieron inútil el gol anotado por Gary O’Neil. Fue el último partido del Middlesbrough FC hasta la fecha en la Premier League, el conjunto de Teeside descendía a los infiernos de un Championship del que aún no ha sido capaz de escaparse.

Un club histórico

Fundado en 1876, y con ni más ni menos que 139 años a sus espaldas, el Middlesbrough, si bien no se ha visto envuelto en la lucha por los títulos, se ha caracterizado por ser un club ascensor entre la primera y la segunda categoría del fútbol inglés. Hay que tener en cuenta que, desde que se unieron a la Football League, los smoggies sólo han estado dos temporadas fuera de las dos primeras divisiones de Inglaterra (en la 1966-67 y, 20 años después, en la 1986-87).

Entre los grandes éxitos conseguidos por la entidad del noreste de Inglaterra, caben destacar sus cuatro títulos de campeón de la segunda división inglesa (1927, 1929, 1974 y 1995), una categoría que se le ha dado bastante mejor que la primera, donde su mejor registro fue el tercer puesto conseguido en la temporada 1913-14, hace ya más de un siglo.

Pero si hay un resultado que enorgullece a los aficionados smoggies es el de la Copa de la Liga 2003-2004, una competición en la que dejaron atrás a rivales como el Everton, el Tottenham Hotspur y el Arsenal antes de batir en la final, disputada en el Millennium Stadium de Cardiff, por 2-1 al Bolton Wanderers. Como curiosidad, en dicho partido, Gaizka Mendieta formó parte del once inicial del Boro, mientras que Iván Campo hizo lo propio en el de los trotters y Javi Moreno salió desde el banquillo pero no fue capaz de ayudar a los suyos a igualar la contienda.

Dos años más tarde, el club del noreste de Inglaterra estuvo a punto de superar ese hito histórico haciéndose con su primer título continental pero, en la final de la Copa de la UEFA de 2006 disputada en Eindhoven, el Sevilla no le dio opción alguna y le batió con un contundente 4-0.

El destino, tras la final europea, iba a deparar tiempos difíciles a un Middlesbrough que, tres años después de rozar la gloria continental, consumaría su descenso a la segunda categoría del fútbol inglés.

Aitor Karanka toma las riendas del proyecto ‘smoggie’

En el inicio de su periplo por el Championship, la nave del Boro siguió comandada por el técnico con el que habían descendido, un Gareth Southgate que iba a ser despedido en octubre de 2009 –a pesar de que el equipo marchaba cuarto a tan sólo un punto del ascenso directo– para ser reemplazado por un Gordon Strachan que sólo sería capaz de acabar en mitad de tabla y que presentaría su dimisión al poco de comenzar la siguiente campaña. El elegido para sustituirle fue el inglés Tony Mowbray, si bien tampoco tuvo fortuna en el objetivo de retornar a la Premier League durante los casi tres años en los que estuvo al mando.

Fue entonces cuando el Middlesbrough FC se fijó en Aitor Karanka, con el cual llegaron finalmente a un acuerdo por el que se convertiría en el mánager del club de North Yorkshire a partir del 13 de noviembre de 2013. El ex del Real Madrid se convirtió, de este modo, en el primer entrenador no británico en la historia del club.

En su primera temporada completa al mando del Middlesbrough –en la 2013-2014, cogiendo al equipo en noviembre, acabó en una discreta duodécima posición a 8 puntos de los playoffs–, el técnico vasco ha conseguido situar a los smoggies en la pelea por el ascenso a la Premier League. De hecho, tuvieron opciones reales de ascenso directo hasta la penúltima jornada (cuando cayeron derrotados por 4-3 en Craven Cottage ante el Fulham), acabando al final en una meritoria cuarta posición, por detrás de Bournemouth, Watford y Norwich City, a tan sólo 4 puntos del ascenso directo.

Durante el año y medio que lleva en Inglaterra –y especialmente durante esta temporada– el ex asistente de José Mourinho ha dotado a su equipo de una solidez magnífica, conformando un bloque que actúa como tal desde la línea de la retaguardia hasta el frente de ataque. Su robustez le ha servido para sacar adelante muchos encuentros complicados, siendo un conjunto muy difícil de derrotar en el que el sistema defensivo ha sobresalido por encima de los demás aspectos futbolísticos.

Para comprobarlo, no hace falta más que mirar las estadísticas para ver que han sido el equipo menos goleado de la competición, recibiendo tan sólo 37 tantos en 46 partidos, una media de 0,8 goles encajados por encuentro. Esa solidez en la zaga le ha permitido sacar un rendimiento magnífico de su producción ofensiva que, con 68 tantos a favor (1,47 por choque), ha sido la más baja de los 8 primeros clasificados.

Patrick Bamford, la estrella

Quizá sea algo injusto destacar una individualidad en un colectivo tan unido y compacto como el Middlesbrough FC, pero la temporada de Patrick Bamford bien lo merece. La campaña del delantero, cedido procedente del Chelsea, está siendo espectacular y ha sido recompensada, a título individual, con el galardón de mejor jugador del Sky Bet Championship –imponiéndose en la votación a Daryl Murphy del Ipswich y a Troy Deeney del Watford–.

Y no es para menos. Su aportación ofensiva y su liderazgo han sido claves en la magnífica temporada de los smoggies. 19 goles (17 en liga y 2 en copa) y 3 asistencias (2 en Championship y otra más en competiciones coperas) son las cifras que ha conseguido hasta el momento y que, a buen seguro, le valdrán un puesto el próximo año en la Premier League. Lo que falta por ver es si será en el Chelsea –propietario de sus derechos federativos–, en el Middlesbrough –en el caso de ascender y de prolongar el préstamo o de hacerse con la propiedad del atacante– o en cualquier otro conjunto de la primera categoría. Ofertas no le van a faltar al joven ariete de 21 años.

Patrick Bamford, el factor diferencial. Foto: mirror.co.uk

En la temporada del Boro también merece una mención especial la actuación del centrocampista y vice capitán Grant Leadbitter. Sus doce goles (11 en liga y 1 en copa) han sido una aportación magnífica desde la segunda línea y Aitor Karanka ha visto en él a un jugador troncal en su escuadra: ni más ni menos que 49 son los partidos que ha disputado el ex del Sunderland y segundo máximo anotador esta temporada del Middlesbrough.

El spanish Middlesbrough

La participación española en el buen hacer del Boro ha sido más que destacable. Y es que, además de Aitor Karanka como entrenador e Iván Pérez Muñoz como parte del cuerpo técnico, en la plantilla del Middlesbrough encontramos hasta 6 futbolistas españoles.

Quizá el más decisivo de todos durante esta campaña ha sido Daniel Ayala. El ex del Liverpool está siendo el líder indiscutible de la defensa smoggie. A su aportación defensiva, el canterano del Sevilla ha aportado unas cifras más que interesantes de 4 goles en liga y otro más en copa. Ha jugado 31 partidos de liga y 5 en las competiciones del KO durante esta campaña con el Boro.

Tras la aportación del joven central, cabe destacar la actuación de Kike García. El ex delantero del Real Murcia ha aportado 9 goles y 3 asistencias en liga y 2 tantos más en copa, siendo uno de los jugadores que más ha utilizado Karanka a lo largo del año: ha vestido la camiseta del Middlesbrough hasta en 49 ocasiones.

Kike García, 11 goles esta temporada. Foto: thenorthernecho.co.uk

Menor cuota de protagonismo han tenido Emilio Nsue (hispano-guineano), que ha participado en 26 partidos de Championship y 2 de copa; Tomás Mejías (7 partidos ligueros y 3 coperos), que ha estado a la sombra del guardameta titular, el griego Dimitrios Konstantopoulos; Albert Damià (6 partidos en la competición doméstica y una aparición en copa); y Fernando Amorebieta, aunque el caso del hispano-venezolano tiene su historia y podría convertirse en uno de los héroes de un hipotético ascenso.

El ex jugador del Athletic Club llegó cedido por el Fulham el pasado 25 de marzo de 2015 y no ha jugado demasiado. Sin embargo, cuando lo ha hecho ha aportado su veteranía tanto desde el puesto como central como desde el de lateral izquierdo. Pero la cosa no se queda ahí, en el partido de ida de las semifinales del playoff de ascenso a la Premier League, el internacional por Venezuela saltó al terreno de juego en el minuto 73 para reforzar la banda izquierda y acabó convirtiéndose en el gran protagonista de la noche al anotar el importantísimo 1-2 para los suyos en el tiempo de descuento. Fue uno de esos momentos en los que un jugador puede entrar en la historia de un equipo, a pesar de no haber sido ni mucho menos protagonista durante la temporada.

Wembley, a un paso. La Premier League, a dos

El pasado viernes 8 de mayo el Boro visitó al sorprendente Brentford en el partido de ida de las semifinales del playoff de ascenso a la Premier League. Si bien los locales jugaron mejor durante gran parte del partido, arropados por el calor de las gradas de Griffin Park, la pegada y la experiencia de los visitantes hicieron que el partido cayera del lado de los de Aitor Karanka.

Jelle Vossen abrió la lata con un cabezazo tras un buen centro de Adam Clayton en el minuto 26 y, tras el desconcierto generado en la decepcionada escuadra local, el Middlesbrough estuvo cerca de sentenciar el encuentro. Pero no fue así y, tras el descanso, el Brentford recogió su merecido premio y gracias a Andre Gray –y a la inestimable colaboración del cancerbero visitante Dimitrios Konstantopoulos– equilibró la contienda con casi 40 minutos aún por jugarse.

El duelo entró en un nulo intercambio de golpes, muy excitante para el espectador neutral, hasta que se llegó al tiempo de descuento. Una vez allí, y cuando parecía que el combate acabaría en tablas, el Middlesbrough botó un córner pasado, George Friend cabeceó hacia el corazón del área y Fernando Amorebieta apareció para, con un gran zurdazo, batir a David Button y poner a los suyos con pie y medio en la gran final por el ascenso de Wembley.

Fernando Amorebieta, el héroe de Griffin Park. Foto: getwestlondon.co.uk

El próximo viernes tendremos el segundo asalto de esta apasionante semifinal. Veremos si los chicos de Karanka siguen con su camino hacia el deseado ascenso o si el Brentford da la gran sorpresa y remonta el resultado adverso de la ida. Wembley espera ya a los finalistas.