Una jornada más los de Rafa Benítez vuelven a demostrar que pueden seguir el ritmo impresionante de la Roma. La Champions está a la vuelta de la esquina y la ciudad de Nápoles pensaba antes en el Marsella que en el Catania. Benítez ya avisó de la importancia del partido en rueda de prensa y alineó un once practicamente titular. El Catania se plantaba en Nápoles en zona de descenso tras salir goleado por 4-0 ante la Juventus y empatar ante el Sassuolo a 0. Los de Luigi De Canio no saben lo que es ganar esta temporada, llevan seis empates y solo tres goles fuera de casa. Con este cartel era predecible que los 'tifosi' napolitanos ya pensasen en el duelo de Champions donde se van a jugar la clasificación ante un Marsella casi eliminado.

Callejón decide en la primera parte

El exmadridista fue el mejor de los suyos en una primera parte ajetreada. El Catania trató de no esperar atrás y de evitar las combinaciones en tres cuartos de campo que tanto peligro ocasionan. El Nápoles dominaba de la forma que más le gusta: controlando el balón. A los 15 minutos, Callejón iba a enganchar un zurdazo a bote pronto directo a escuadra. Tras una buena combinación con Higuaín, el balón le quedó franco en la frontal derecha del área para poner el 1-0 en el marcador. Rafa Benítez respiraba, lo más importante para el equipo era tener un partido tranquilo para no llegar muy desgastados al miércoles. Los locales tocaban con calma en busca de una buena combinación entre los trecuartistas y sentenciar el encuentro. Así iba a llegar el 2-0, Insigne hizo una buena diagonal hacia el centro para dejarla atrás a Hamsik que disparó a la escuadra con la zurda.

El partido estaba totalmente controlado por los locales pero el Catania decidió venirse arriba. Un inspirado Maxi López era el guía de los ataques visitantes. 'La gallina' Maxi iba a ser protagonista en el gol visitante, un gran taconazo para Biraghi rompió toda la defensa para que este último centrase a Lucas Castro y rematase al fondo de las mallas. La defensa local se durmió completamente y en el minuto 25 empezaba un nuevo partido.

Los últimos 20 minutos de la primera parte recordaron a los 20 primeros. La posesión era claramente local pero los defensores no conseguían enlazar con los medios. La más clara fue para Higuaín tras un buen pase de Hamsik aunque no consiguió ver puerta. El Catania no se echó atrás y pudo dejar helados a los 'tifosi' napolitanos con alguna que otra contra que falló en el último pase.

Quien perdona puede acabar pagándolo

El Nápoles salió con las ideas claras tras el descanso: sentenciar. La conexión Callejón-Higuaín propició la primera gran ocasión de la segunda mitad, el español asistió al 'Pipita' a la espalda de la defensa que disparó a puerta pero Andújar conseguió despejar. El guardameta argentino iba a convertirse en la figura de su equipo, volvió a aparecer ante los disparos de Hamsik e Insigne y siempre consiguió evitar el gol. El Catania no sabía qué hacer para parar las ofensivas locales, se habían esfumado 25 minutos y no conseguían intimidar a un Pepe Reina que estaba muy tranquilo.

A falta de 20 minutos, Hamsik inventaba un pase genial para Higuaín que sacó un disparo potente pero una vez más Andújar sacó una mano salvadora. El dominio era aplastante y el tercer gol local parecía cuestión de minutos, tan solo nueve minutos después Dzemaili regateó a Andújar pero acabó muy escorado y su pase atrás fue rechazado por la defensa.

El Catania no aparecía en ataque aunque en el último minuto iba a conseguir una falta a unos diez metros de la frontal del área. El fútbol no es ni mucho menos justo y el que perdona lo puede pagar. Todo el Catania subió al área rival pero Raúl Albiol despejó de cabeza para alejar el peligro.

Tras esta victoria el Nápoles sigue empatado con la Juventus en la segunda plaza y se vuelve a colocar a dos puntos de la Roma que jugará mañana en Turín ante el Torino de Cerci. El Catania no saldrá de los puestos de descenso pero sale reforzado de San Paolo ya que dio la cara en todo momento y con un poco más de suerte podría haber asustado a los de Benítez.