Llegaban los dos conjuntos de Emilia-Romaña al Ennio Tardini con la moral alta tras el empate del Bologna ante el Inter y la sorprendente victoria de los de Donadoni en San Paolo, pero sólo los de Pioli tienen motivos para la alegría tras el choque de hoy.  Después de jugar buena parte del partido con uno más y controlar el partido en su segundo acto, el Parma se va con la sensación de haber perdido dos puntos mientras el Bologna, que se adelantó en el marcador, puede pensar que se encontró uno tras aguantar estoicamente la arremetida parmesana. En cualquier caso a ninguno le vale demasiado, ni al Bologna para alejarse de la zona de descenso ni al Parma para asentarse en la zona templada.

Con malas noticias acudió el Bologna al encuentro debido a la ausencia de su referencia, Alessandro Diamanti, mientras en el Parma era baja por sanción Walter Gargano. Donadoni apostó por una defensa de cuatro con Biabiany más adelantado, pero no fue el día del francés. Por su parte, Pioli se mostró fiel a su zaga de cinco. El choque comenzó sin un dominador claro, aunque se vio al Bologna con más intenciones de llegar con peligro al área de Mirante. De esta manera, un balón largo al borde del área parmesana fue cabeceado de espaldas por Bianchi para que Kone, que llegaba de frente, empalase de volea en un golazo ante el que nada pudo hacer el meta del conjunto local.

No se estaba mostrando muy preciso el Parma, desacertado en el pase, sin embargo aprovechó una falta sacada desde la esquina del campo, casi un córner, que fue tan mal defendida por el Bologna como bien rematada por Cassano, que marcó su gol 100 en el Calcio y empató el encuentro para los suyos. Talentino estaba siendo el mejor de su equipo mientras el Bologna, que dio un paso atrás tras el gol, seguía teniendo sus opciones como en una ocasión de Lazaros en un contraataque cuyo disparo fue desviado por Mirante. El resto de la primera mitad transcurrió entre faltas y parones con los ánimos un tanto caldeados, como en una discusión entre Cassano y Diego Pérez que acabó con amonestación para ambos.

Un segundo tiempo marcado por la expulsión de Sorensen

En una falta a Sansone bastante prescindible, el danés Sorensen vio la segunda cartulina amarilla y dejó a su equipo con diez, lo que marcó el transcurrir del partido aunque no su resultado. El Parma se hizo totalmente dueño del choque y los Rossoblú sólo pudieron recurrir a aislados contragolpes. No obstante supieron aguantar la embestida parmesana, que fue incapaz de encontrar huecos en la zaga rival y hubo de recurrir a disparos lejanos, siempre bien respondidos por el arquero Curci, protagonista de un buen partido. También dispuso el equipo Gialloblú de numerosos córners, pero fue incapaz de sacar provecho al juego a balón parado. Por su parte, el Bologna sólo inquietó a Mirante con un lanzamiento de falta de Kone que se marchó fuera por poco.

Cuarto partido consecutivo del Bologna sin ganar, que sigue metido en la zona peligrosa de la Serie A aunque tiene motivos para marcharse satisfecho del Ennio Tardini, donde los locales lo tuvieron todo a favor para lograr los tres puntos, pero ni Curci estaba por la labor ni dispusieron de un killer con más presencia en el área rival.