Una Juventus que es medida con una vara de doble rasero, según la competición en la que juega. En el Calcio no ha habido ningún rival que haya sido capaz de hacer sombra al equipo de Conte, desde la llegada, hace ya tres años, del técnico a Turín, pero cuando sale por los campos de Europa, sus rivales le hacen bajar de su trono dorado.

Temporada tras temporada, Conte mejora los números de su Juventus, consiguiendo quedar invicto toda una temporada en su primer año, sacando más puntos la segunda campaña y en lo que llevamos de campeonato actual, el técnico ya ha superado sus mejores registros, igualando a otra gran Juventus, la entrenada por Fabio Capello en la temporada 2005-06.

Pero a diferencia de Italia, Europa no tiene a la Vecchia Signora entre las principales potencias futbolísticas. La Champions League, sigue resistiéndosele a la libreta de Conte, que tras coger al equipo en su primer año sin competiciones europeas, consiguió hacer un decente papel la pasada temporada en su debut como entrenador en Champions, llevando al conjunto bianconero hasta los cuartos de final, donde el rodillo alemán del Bayern de Munich, acabó interponiéndose en su camino.

Esta campaña, todo hacía indicar que la Juve superaría sus registros europeos de la temporada precedente, al menos que superaría sin problemas la fase de grupos, pero el descalabro en Copenhague o en Estambul acabó llevando al mejor equipo de Italia a la Europa League, cuya final tendrá lugar precisamente en su estadio.

Al margen del papel realizado en las dos competiciones, la Juve ha cerrado el año con dos títulos más en su vitrina: Scudetto y Supercoppa, llegando hasta semifinales en la Coppa de Italia. Conte ha conseguido forzar un bloque compacto y sólido, que cada año en verano ve reforzado con alguna pieza más.

Este verano, llegó el catalogado como “heredero” de Alessadro Del Piero, el mayor goleador de todos los tiempos en Turín y su máximo estandarte. Procedente de Manchester recaló Carlitos Tévez para enfundarse la camiseta con el número 10 y convertirse en el nuevo abanderado del equipo de Conte. Llegó entre dudas por su posible aclimatación al Calcio, pero en la primera vuelta ya se ha encargado de borrar cualquier atisbo negativo.

Si bien es cierto que en Europa no consiguió ver portería a pesar de jugar igual que en Italia y de no esconderse en los partidos como se podría presumir, en el Calcio ya suma once goles que le convierten en el segundo máximo goleador del campeonato, a tres tantos de Giuseppe Rossi.

Pero no solo de Tévez vive esta Juventus. En el mediocampo encontramos quizás, a los mejores mediocampistas que actualmente conviven en un mismo equipo: Paul Pogba, Arturo Vidal  y Andrea Pirlo. El francés ha sido la auténtica revelación no solo de Italia, sino de Europa. Su conquista del trofeo Golden Boy no hace más que premiar el gran trabajo realizado durante toda la temporada, donde ha sido capaz de asentarse en un club como la Juventus, ganar el Mundial Sub 20 siendo elegido mejor jugador del torneo y meter a Francia en el próximo Mundial de Brasil. Y todo esto con 20 años.

Las ofertas estratosféricas no cesan de llegar al club de Corso Galileo Ferraris por el talento francés, por el que suspiran todos los grandes de Europa y que, día a día y partido a partido, se va haciendo más y más fuerte. Pogba es el futuro y en la Juve harán bien si consiguen “convencer” al chaval con mejores incentivos.

El que es casi seguro que no se moverá de Turín es Arturo Vidal, quizás el centrocampista en mejor forma de este 2013. Desde hace dos años se ha convertido en uno de los líderes de la Juve campeona de Conte y su nombre ya suena con fuerza por todo el mundo. Su constancia y regularidad, le han llevado a copar portadas por toda la esfera y los grandes suspirán por tenerlo en sus filas, pero el chileno ya ha dado el sí a la Signora y ha renovado recientemente su contrato.

De Andrea Pirlo poco se puede decir que no se haya dicho ya. Su nominación al Balón de Oro de este año ya habla por sí sola. A sus 34 años, seguir estando en la lista de candidatos que aspiran a ser el mejor jugador del mundo y ser el único italiano en las nominaciones, dejan claro que los años para don Andrea parecen no pasar.

A pesar de que ha acabado este 2013 en la enfermería, Pirlo ha sido otra temporada más el faro, el guía y la luz del campeón. Sin él en el campo, la Juve nota su ausencia y pierde mucha calidad en la medular. Acaba contrato este año y su renovación es uno de los grandes focos de interés en el club de Piamonte, que solo será despejado en las próximas semanas.

Pero para ser el mejor en Italia, tienes que ser el más fuerte en defensa y aquí la Juventus no tiene rival. Compuesta por un bloque de hormigón y acero inquebrantable, Buffon posee la mejor defensa del Calcio. Si al considerado el mejor portero de los últimos 20 años, le colocas delante, la colocación de Bonucci, la fuerza de Chiellini y la anticipación de Barzagli, consigues acabar todas las temporadas siendo el menos goleado y dejas las migajas de la Coppa a un siempre cumplidor Storari.

La defensa titular de la azzurra no está sola: posee recambios de calidad, con el siempre fiable Cáceres y el llegado este verano del Torino, Ogbonna. En las bandas, la Juventus posee dos puñales, que hacen las veces de defensas y delanteros, dos carrileros totales con el correcaminos Lichtsteiner en banda derecha y con el poderoso Asamoah por banda izquierda. Recambios hay, pero no ofrecen las mismas garantías: Isla que todavía no ha encontrado su mejor nivel en el Udinese y otros tres jugadores que cubren las expectactivas sin mayores pretensiones como los italianos Peluso, De Ceglie y Padoin, protagonistas secundarios, siempre necesarios en todos los equipos.

Uno de los que empezó muy bien el año y acabó ofreciendo un nivel muy por debajo de lo que es habitual en él, es Claudio Marchisio, quizás el principal damnificado de la explosión de Pogba y el gran momento de Vidal y Pirlo. En el esquema de Conte solo hay cabida para tres y “Il Principino” ha sido el que más ha pagado los platos rotos. Además, la lesión sufrida en la Supercoppa de verano hizo que le costara recuperar la forma. Conte lo tiene entre sus predilectos y con la lesión de Pirlo ha recuperado la plaza de titular.

Pero no solo marca goles Tévez en esta Juve. Llegado gratis de Bilbao en verano, apareció un león más para Conte. Fernando Llorente, a base de goles y buen juego, ha conseguido asentarse en la plaza de titular de la delantera bianconera. Tras un inicio complicado y lleno de dificultades y sobre todo de banquillos, el delantero español consiguió ganarse la confianza del técnico juventino y ya suma una buena cifra de goles en su debut en el Calcio.

La explosión de Llorente y las lesiones han dejado fuera de la titularidad y muchas veces del equipo a Mirko Vucinic. El mayor asistente del equipo la pasada campaña ha pasado de ser la pieza angular por la que pasaban todas las acciones ofensivas del equipo a ser un mero espectador más desde la enfermería. Fabio Quagliarella ha alternado con Llorente momentos de titularidad y a base de goles importantes está acallando las voces que lo situaban fuera de la nave en verano, cuando Alessandro Matri hizo las maletas rumbo a Milan y el siguiente parecía que sería el napolitano.

La competencia ofensiva no ha permitido a Sebastian Giovinco gozar de mayor protagonismo. El delantero italiano no está teniendo muchos minutos y el mundial está a la vuelta de la esquina, con lo que no se descartaría una cesión para que pudiera tener opciones de acudir a la cita de Brasil. Al que se espera como agua de mayo es a Simone Pepe, lesionado desde hace más de un año. Su polivalencia y su adaptabilidad permitirían a Conte emplear el 4-3-3 que en ocasiones desearía poner en práctica y  del que sin el centrocampista de la Juve debe prescindir.

Conseguir tantos puntos, mantener rachas de imbatibilidad, anotar tantos goles, en definitiva, vencer tanto, no sería posible sin dos personas que se han convertido en claves, para el devenir de esta Juventus, que pasó de vivir en el infierno a saborear las mieles del triunfo. Dos personas que con su trabajo, esfuerzo y dedicación han conseguido levantar el club tanto deportiva como económicamente. Estamos hablando del presidente Andrea Agnelli y de su mano derecha, el director general, Giuseppe Marotta.

Para el recuerdo de este 2013, quedará la victoria en el derbi ante el Torino, el Scudetto ganado con tres jornadas de antelación en casa ante el Palermo, los golazos de Pogba al Udinese, el triunfo en la Supercoppa ante el Lazio, los duelos ante el Real Madrid, las goleadas al Catania, Lazio o Atalanta en el campeonato…

Pero también habrá recuerdos no tan agradables, como la derrota en Estambul, la lesión de Pirlo, la eliminatoria contra el Bayern, la remontada de la Fiorentina, los ataques a Conte por el Calcioscommese…

Un año lleno de emociones y sobre todo de triunfos y records que han ensalzado todavía más a la Juventus en Italia y condenado una vez más al infierno europeo que podría albergar aun una esperanza llamada Europa League.