Llegaba la Juve con necesidad de mejorar su imagen después del polémico encuentro contra la Roma, y del traspiés del sábado pasado en Reggio Emilia. Allegri recuperó para la causa a Vidal, castigado y excluido de la convocatoria contra el Sassuolo, aunque el chileno sigue muy lejos de su mejor forma. Las cualidades que mejor lo definen, la garra y la intensidad, pasaron desapercibidas en Atenas, y esto no hizo sino empeorar las prestaciones de una Vecchia Signora que cada vez se aleja más de su mejor versión.
La Juventus sigue sin encontrarse
Los primeros 45 minutos de partido se disputaron sin un claro dominador, si bien es cierto que las ocasiones más claras las tuvieron los de Turín. Dos fueron los jugadores bianconeri que, por motivos bien distintos, destacaron en esta primera mitad. Morata, finalmente en el once inicial, dedicó su tiempo a reivindicarse como titular. El ex mirlo ensombreció a Tévez echándose a su equipo a las espaldas, comandando las contras que permitieron a la Juventus rozar el gol.
En el 10’ el madrileño se inventó una gran jugada que, sin embargo, quedó en aguas. Poco después, él mismo se encargaría de rematar un saque de esquina de Pirlo que a punto estuvo de acabar en gol fantasma, pues entre Tévez y Elabdellaoui se encargaron de sacarlo de la mismísima línea. En el 18’ el argentino vio cómo le anulaban un tanto por claro fuera de juego.
El otro jugador bianconero a resaltar fue Pirlo. Pero en su caso, por razones mucho menos positivas. El ‘21’ de la Juve, habitual maestro de ceremonias, se mostró ausente e incluso perdido en ciertos tramos del encuentro. Tan acostumbrados estamos a su guante, su música armoniosa y su elegancia, que asistir a su declive produce escalofríos y grandes dosis de nostalgia a los amantes del buen fútbol.
Suyo fue el error que desencadenó el gol del Olympiacos. Pirlo perdió un balón en el centro del campo, justo por donde pasaba el Chori Domínguez, quien lideró la contra que acabó adelantando a los locales en el marcador. El argentino se plantó en el área de Buffon tras una gran jugada, cedió a Mitroglou, escorado a la izquierda, y éste la retrasó para que Kasami rematara casi a placer. Domínguez, ex de Rayo y Valencia, fue sin lugar a dudas el mejor del equipo dirigido por Míchel. Activo, incisivo y presente en todas las fases del juego, fue quien permitió que los griegos se enfrentaran de tú a tú a un equipo técnicamente superior.
Asedio italiano y resurgir de Roberto
Tras el paso por vestuarios el partido ganó en emoción. El conjunto de Massimiliano Allegri pareció salir con la intención de revolucionar el encuentro aunque los locales supieron contrarrestarlo aumentando también su nivel de revoluciones. A la Juventus le falló, como viene siendo habitual, su centro del campo. El técnico Juventino puso en evidencia a Pirlo cambiándolo en el 57’ para dar entrada a Marchisio, aunque ni él ni Vidal fueron capaces de poner orden e ideas en la medular.
El encuentro se convirtió en un ida y vuelta que acabó favoreciendo a la Juventus, quien gozó de clarísimas ocasiones que no acabaron en gol por una sola razón: Roberto decidió erigirse en dios griego. El ex portero del Zaragoza paró incluso aquello que ya se festejaba y acabó siendo ovacionado por los suyos. Quien más lo sufrió fue Morata, que mereció el gol hasta en tres ocasiones pero se fue del Georgios Karaiskakis de vacío.
A falta de cuatro minutos para el final, Allegri apostó el todo por el todo dando entrada a Giovinco por Pogba. El delantero turinés, en boca de todos tras su buen hacer con la Italia de Conte, no fue el factor decisivo que la Juventus necesitó para acabar transformando sus múltiples ocasiones. La Vecchia Signora acabó desinflándose poco a poco mientras el Olympiacos veía cómo pasaba el tiempo sin desgastarse en exceso.
El resultado fue una nueva victoria como locales de los de Míchel, quienes se hacen fuertes tras conseguir vencer en su campo a los dos cocos del grupo A. La Juve, en cambio, vuelve a meterse un año más en problemas contra todo pronóstico, aunque por fortuna para ella, se jugara con toda probabilidad su pase a octavos en Turín.
Olympiacos (1) | Juventus (0) | ||
Roberto | 9 | Buffon | 6 |
Elabdellaoui | 6 | Ogbonna | 5 |
Abidal | 5 | Bonucci | 4 |
Botía | 6 | Chiellini | 6 |
Masuaku | 6 | Asamoah | 5 |
Maniatis | 7 | Pogba | 6 |
Milivojevic | 5 | Pirlo | 3 |
N'Dinga | 6 | Vidal | 6 |
Kasami | 6 | Lichsteiner | 5 |
Domínguez | 8 | Morata | 8 |
Mitroglou | 7 | Tévez | 6 |
Suplentes | |||
Afellay | 5 | Marchisio | 6 |
Fuster | - | Pereyra | 5 |
Giannoulis | - | Giovinco | - |