Portugal recibía en casa a la temible selección rusa, líder del grupo F, con un objetivo claro, la victoria. Sin margen de maniobra, los lusos, capitaneados por Cristiano, salieron a por todas en un Estadio da Luz lleno hasta la bandera.
 
Los rusos, que ya vencieron a Portugal por uno a cero en su último enfrentamiento, aventajaban por un punto a la selección comandada por Paulo Bento, eso sí, con dos partidos menos.
 
Portugal entró dominando en los primeros minutos, volcando el ataque por la banda izquierda y con un Ronaldo sin posición fija, libertad total para el capitán. Un gol tempranero adelantaría a los lusos en el marcador, Postiga consigue rematar en el área pequeña un centro medido de Veloso al saque de una falta.
 
Rusia no conseguía trenzar una jugada, sin medio de campo creativo, se centró en buscar el rigor defensivo y la salida rápida de balón. Dos lesiones del combinado ruso obligaron a Capello a mover ficha,  los cambios se hicieron notar y el equipo se vino arriba. El técnico italiano adelantó la línea de presión impidiendo la salida de balón de los portugueses que perdieron así presencia en el partido.
 
Zhirkov tuvo el gol.
 
Las ocasiones y el espectáculo crecieron en los últimos minutos de la primera parte con oportunidades en ambas porterías, la mejor para los rusos vendría propiciada por un mal despeje de Rui Patricio, que abandona su portería para luchar por un balón dividido, la bola queda muerta en botas de Zhirkov, su remate se escapa a escasos metros del poste izquierdo. Portugal se fue al descanso con el susto en el cuerpo, una ventaja escasa que tendrían que defender en la segunda parte.
 
Y salieron con ganas, en el primer minuto Ronaldo se va en velocidad y lanza un remate cruzado que consigue atajar Akinfeev. Fue un primer aviso del madridista, que a pesar de disponer de varias ocasiones, no consiguió hacer gol, pudo ser mala suerte o quizás presión, la capitanía o jugar ante su público, posibles culpables.
 
Transcurrieron varios minutos con poco fútbol, cuando se empezaron a escuchar los primeros silbidos en da Luz, el resultado era corto y el peligro acechaba la portería lusa, Kerzhakov dispuso de una buena ocasión aprovechando un balón al hueco, sin embargo, su remate lo atajó Rui Patricio sin  problemas. 
 
CR7 terminó  como delantero centro.
 
Paulo Bento buscó soluciones en el banquillo, se retiró Postiga, autor del primer gol, para dar entrada a Nani, este cambio movió a Cristiano de posición que jugó los últimos minutos como “nueve”.
 
La suerte se alió con los portugueses, Skomina, árbitro del encuentro, anulaba un gol a Rusia por supuesto fuera de juego. Muchos nervios y emoción en los diez últimos minutos, los rusos renunciaron al balón pero no a las ocasiones, que fueron numerosas. También la tendría Cristiano una vez más, en un balón al espacio, su remate fue bloqueado por una gran estirada de Akinfeev que estuvo soberbio. 
 
Con esa última ocasión de Crisiano el partido llegó a su fin, victoria para Portugal ante una Rusia que mereció algo más, los lusos dan un paso al frente, líderes de grupo con catorce puntos, y cada vez están más cerca del Mundial de Brasil.