El Benfica tenía ante sí una oportunidad inigualable de dejar atrás fantasmas del pasado y, tras un inicio un tanto titubeante, colocarse como líder en solitario de la Liga Zon Sagres. Sin embargo, los pupilos de Jorge Jesús no tuvieron su día de cara a puerta y acabaron pagando con errores defensivos esa imprecisión ofensiva. Quizás tenían la cabeza en el próximo compromiso de Champions League ante el PSG, o quizás no, y simplemente no pudieron superar a un aguerrido Arouca, que estuvo muy vivo para aprovechar las pocas oportunidades de las que dispuso.

Con las bajas, importantes, de Cardozo y Matic, y también de Siqueira, Sílvio y Amorim, a parte de la ya conocida de Salvio, el Benfica encaraba un encuentro, a priori, asequible ante uno de los equipos más flojos de la liga portuguesa y que, precisamente, no pasaba por su mejor momento. Siempre es difícil salir con la intensidad necesaria a este tipo de encuentros que ya parecen decididos antes de empezarlos, pero el fútbol siempre da lugar a sorpresas, y como esta temporada se está demostrando, en la Liga Zon Sagres cualquier equipo puede ganar a cualquiera, o al menos, arañar algún punto, y el Arouca no iba a ser menos.

Los errores de siempre condenan al Benfica

El Benfica salió de los vestuarios relajado, con el pensamiento de que de una forma u otra, los tres puntos se quedarían en Lisboa. Jugando a medio gas, se asomaban al área de Cássio, pero apenas inquietaban al guardameta del Arouca. Un juego muy simplista, que se basaba en los centros laterales, esperando que Rodrigo o Lima ganasen la partida a los centrales rivales y lograsen rematar. Con este panorama en las águilas, el Arouca aguardaba atrás cómodamente, sin muchos apuros para despejar esos centros laterales y para, en alguna que otra ocasión, salir con rapidez al contraataque. En estas, el bueno de Mika sufría una lesión en su rodilla izquierda, y tenía que dejar a los ocho minutos su puesto en el centro de la zaga a Soares.

Así sería como, a los 18 minutos, el Arouca se adelantaría en el marcador. Pintassilgo, muy activo durante todo el partido, forzaba una falta cercana a la línea de banda. A priori, no debía ser una falta muy peligrosa para la zaga del Benfica. David Simao, formado en el Benfica por cierto, botaba la falta, el balón primero superaba a una floja barrera, luego pasaba cerca del pie de un desafortunado Bruno Cortez y, posteriormente, acababa en el fondo de la portería de Artur. Una concadenación de errores permitía a David Simao convertir un gol muy importante para él y para su equipo, casi de forma involuntaria. 

Tras esto, el Benfica pisó el acelerador, y pasó a jugar a medio gas, y con eso le valía para crear ocasiones de gol con facilidad. Sin embargo, el acierto de Cássio y el desacierto de, sobre todo, Lima y Rodrigo, impedían a los lisboetas lograr el empate. Se echaban en falta las subidas de los laterales, esta vez Pereira por la derecha y Cortez por la izquierda. Precisamente, en una de las pocas subidas del uruguayo por el costado diestro, en una jugada rápida, como pocas hizo el Benfica, combinaba bien con Gaitán, que permitía a Maxi Pereira meter un balón de gol dentro del área del Arouca que no perdonaría Rodrigo. Tercer gol en los últimos tres partidos del delantero hispano-brasileño que, dentro de sus posibilidades, está haciendo olvidar a Cardozo, una tarea harto complicada. 

Tras el descanso, ambos equipos entraron algo "fríos" al partido. El Benfica poco a poco fue engrasando la máquina, con una nueva pieza, Sulejmani entró en sustitución de un flojo, muy flojo, Bruno Cortez, lo que hizo que Gaitán se viese obligado a jugar como lateral zurdo, algo que sin duda acabaría penalizando a las águilas. En el segundo tiempo, el cuadro local perdió la chispa con la que acabó el primer acto, lo que hacía que de nuevo los ataques fueran lentos, con pocas ideas, con el consiguiente enfado de la afición encarnada. Por su parte, el Arouca ni siquiera se asomaba por el área de Artur.

Acumulación de delanteros sin acierto

Jorge Jesús tomó una decisión un tanto controvertida, sentó a Markovic, cierto es que el serbio estaba pasando desapercibido, para meter a otro punta más, el argentino Funes Mori. Mucha acumulación de hombres dentro del área, pero pocos que llevasen hasta esa zona el esférico. Poco a poco el Arouca se fue estirando, especialmente tras la entrada de Serginho, que fue un incordio para Maxi Pereira desde que ingresó sustituyendo al español Ceballos. En una segunda jugada, cuando la defensa del Benfica salía de su área, Pintassilgo cazaba un balón suelto que parecía perderse por línea de fondo, Gaitán, en una posición que no era la suya, no estuvo bien, el atacante del Arouca centró de espaldas, y Serginho aparecía en el segundo palo para cabecear a puerta vacía y hacer el segundo tanto de los de Pedro Emanuel en da Luz

El Benfica tenía quince minutos para voltear la situación y conseguir dos goles que le diesen el liderato en solitario de la Liga Zon Sagres. De nuevo, un gol del rival tuvo que servir para que los benfiquistas le metiesen una marcha más al encuentro. En una jugada de Sulejmani dentro del área, Iván Balliu entraba un poco pasado y cometía penalti sobre el atacante serbio. El encargado de lanzarlo sería Lima, y el brasileño no perdonaba. El Benfica conseguía el empate a dos goles a falta de algo más de cinco minutos para la conclusión del choque. Ivan Cavaleiro entraría a falta de pocos minutos para el final, algo que por el bien del Benfica, debió suceder mucho antes. Precisamente, el canterano benfiquista, estrellaría un balón contra el palo tras un gran servicio de Nico Gaitán. Luisao acabaría jugando como delantero centro, por si no hubiera pocos que desempeñasen esa función. El central brasileño tendría buenas ocasiones para lograr el tanto de la remontada, pero el partido estaba destinado al empate.

Errores en ambas áreas condenan al Benfica a un empate inmerecido por los mostrado, pero quizás merecido por la actitud en algunas fases del encuentro. El Arouca trabajó para llevarse algún punto, y lo acabaría logrando, no sin esa pizca de fortuna siempre necesaria. Ahora el Benfica sólo piensa en el partido del próximo martes ante el PSG, donde se juega el todo por el todo por tal de seguir vivo en la Champions League, aunque no depende de sí mismo, ya que el Olympiakos le tiene el gol average ganado y se encuentran ambos equipos empatados a puntos. En Liga Zon Sagres, ahora es turno para que Sporting se coloque como líder en solitario, y Oporto empate a puntos con Benfica. Por su parte, el Arouca logra un punto que le puede permitir salir de los puestos de descenso, y a la larga puede ser un punto de inflexión en su campaña liguera.