En un día en el cual el universo Benfica recordaba a Eusébio y a Fehér, Jorge Jesus colocó en el once titular hasta 7 jugadores portugueses, algo que no sucedía en toda la temporada. André Gomes fue uno de ellos y la joven promesa dijo presente. Gran parte del juego encarnado pasó por las botas del número 30, además de su gran entendimiento con un veterano como lo es Rúben Amorin, quien también realizo una gran exhibición.

El Benfica entró con un 4-4-2, mientras que el Gil Vicente jugaba con su habitual 4-3-3. Ambos técnicos tenían una idea clara, este sería un ensayo para el próximo juego entre ambos equipos, este si con tres puntos más importantes de los que se disputaron ayer.

André Gomes y veintiuno más

De esta manera los locales se encontraron con un rival bien organizado, con las líneas juntas, cerrando cualquier tipo de espacios. Así que el Benfica se tenía que poner manos a la obra para generar espacios o romper ese muro que encontró en el campo rival y ahí apareció André Gomes. El juego tenía el ritmo que él quería y de sus pies llegó la primera ocasión de peligro del partido en el min.18, cuando recibió un balón a la entrada del área, dejó a un adversario por el camino y su potente disparo salió centrado para una defensa ‘fácil’ de Adriano. Ya estaba dado el primer aviso.

Minutos más tarde nuevamente André Gomes generó peligro, esta vez asociándose con Funes Mori, quien con un brillante pase deja al joven portugués solo dentro del área, pero su remate sale besando el segundo palo del meta visitante. Otro aviso llegó en el min.28, buena jugada entre Ivan Cavaleiro y Funes Mori, siendo el argentino derribado dentro del área por Vítor Vinha. El 9 del Benfica fue el encargado para cobrar la pena máxima, pero Adriano detuvo el balón y evitó que se abriera el marcador.

El primer tiempo terminó con dos grandes oportunidades a balón parado para el Benfica, dos córners que casi llegan a convertirse goles olímpicos. El ejecutor de los tiros de esquina, André Gomes, el dueño del balón.

El segundo tiempo comenzó sin grandes cambios. Los dos técnicos lanzaron a los mismos protagonistas para el césped del Estadio Do Restelo. Pero la modificación llegó con la mejoría de Rúben Amorin dentro del campo, el Benfica fue más peligroso, más rápido y el Gil Vicente cada vez tenía más problemas.

Sulejmani resuelve y entran los ‘mininos’ de Seixal

La primera jugada de peligro de la segunda parte fue para los locales y explica la mejoría en el juego de Rúben Amorin. El portugués conjuntamente con Djuricic ejerció una presión alta sobre el central gilista, el resultado, robo de balón y este terminó en el fondo de las redes del arco de Adriano, pero el gol fue anulado correctamente por el asistente, ya que Amorin se encontraba en fuera de juego.

El gol no tardaría en llegar y en el min.55, en una jugada triangulada entre Rúben Amorin, Ivan Cavaleiro y André Almeida, donde este último envió un excelente centro al área, Funes Mori cabecea el balón que da en el travesaño y en el rebote Sulejmani hace el 1-0.

Con la ventaja en el marcador André Gomes seguía haciendo de las suyas en el medio campo, mientras Jorge Jesus optó por dar entrada a las jóvenes promesas benfiquistas, que este año están dando mucho de qué hablar en el equipo B: Hélder Costa, Bernardo Silva y Joao Cancelo.

A los cánticos de los aficionados encarnados, quienes recordaban la memoria de Eusébio y Fehér, se les sumaron los nombres de estos tres jugadores, debido a que la parroquia benfiquista estaba esperando el momento para verlos debutar con la camisa del equipo principal. Bernardo y Hélder Costa gozaron de oportunidades para ampliar el marcador, pero no las aprovecharon. Pero ayer estos jóvenes demostraron que la cantera del Benfica está trabajando muy bien. Talento hay, ahora toca que se confíe en ellos.

Vídeo del gol de Benfica, apuntado por Sulejmani (SLB), min.55: