El Sporting consiguió su segunda victoria en Champions ante el modesto Maribor en el José Alvalade, en un partido en el que los 'leones' supieron materializar el dominio ante los eslovenos a base de goles, aunque pudieron hacer más tantos, ya que la defensa 'púrpura', hoy de amarillo, estuvo muy blanda durante todo el encuentro.

El choque estuvo marcado por el apagón de 48 minutos que tuvo el partido parado desde el descanso hasta el final de todos los partidos que se jugaban a la misma hora. Mientras los focos estuvieron apagados, los espectadores protagonizaron la imagen cómica del partido iluminando el terreno de juego con sus teléfonos móviles.

Buen comienzo del Sporting de Portugal

Los locales afrontaban el partido con la intención de asaltar la segunda plaza del grupo que le diese la oportunidad de conseguir el pase a cuartos sin la necesidad de ganar en Stamford Bridge la próxima semana y frente a un Maribor cuyo objetivo era salir vivo del feudo verdiblanco. Nani llevó la batuta del juego ofensivo del Sporting, acompañado de un enchufado Jefferson.

Nani llevó la batuta del juego ofensivo del Sporting junto a Jefferson

El Sporting necesitaba los tres puntos para seguir vivo en la pugna por la clasificación, y así lo demostró. Salió enchufadísimo, tanto que en tan sólo diez minutos, una jugada por el carriz izquierdo acabó con un centro al corazón del área al que no llega Handanovic y Mané sólo tiene que empujarla al fondo de la red. Los 'leones' no bajaron el pie del acelerador y siguieron avasallando la portería de los eslovenos, hasta que, en el 35, tras varias intentonas de Nani, el ex del United caracoleó a placer dentro del área y soltó un derechazo al que nada pudo hacer el meta balcánico para hacer el segundo gol, que puso el 2-0 en el marcador del José Alvalade.

Los 'leones' fueron superiores en todos los sentidos y los 'viola' apenas dispusieron de ocasiones de peligro, la primera llegó al borde del descanso, en el minuto 42, cuando una jugada por el carril izquierdo acabó en un centro al área pequeña que Jefferson empujó al fondo de la red de forma involuntaria, haciendo así el 2-1 que recortaba distancias para el conjunto esloveno, que tras el gol, intentó venirse arriba, cosa que evitó de forma muy efectiva el Sporting, que no bajó el listón en los 45 primeros minutos.

Con esto llegábamos al descanso, que estuvo marcado por el apagón que tuvo el partido parado durante 58 minutos, lo que hizo que la segunda mitad no se iniciase de forma simultánea a sus partidos coetáneos, ya que el barrio donde está situado el estadio José Alvalade se vio afectado por un fallo eléctrico que dejó el feudo verdiblanco sin iluminación y por ende, sin partido. Este hecho dejó la imagen del partido; los espectadores que presenciaron el encuentro desde las gradas del estadio iluminaron el terreno de juego con sus teléfonos móviles. No es la primera vez que se ve una imagen así en un estadio de fútbol.

Marco Silva estuvo acertado en los cambios, que dieron chispa al Sporting

La segunda parte estuvo marcada por el bajón en el nivel de juego del Sporting, que dio una libertad al Maribor que sus jugadores no supieron, o no pudieron, aprovechar este frenazo en el ritmo de juego local. Los lisboetas intentaron incrementar la ventaja en el marcador, pero los balcánicos no les dejaron y comenzaron a a salir a atacar la meta de Rui Patricio aunque de forma estéril ya que la mayoría de los tiros se iban por encima de la meta del portero luso. La segunda mitad fue muy reñida y disputada entre ambos conjuntos, hasta que en el minutos 65 un balón al área bajado por Nani fue rematado por Slimani de volea para sentenciar el partido dejando uno de los goles más bonitos de la jornada.

Con este resultado, los portugueses no necesitan más que un empate en tierras londinenses para conseguir el pase a los octavos de la Champions League, gracias a la derrota del Schalke por 0-5 ante el Chelsea en Gelsenkirchen, aunque una victoria le daría la clasificación asegurada.