El Sporting Clube de Braga y el Vitória Sport Clube no consiguieron pasar del empate en el segundo 'Derbi do Minho' de la temporada. El 'Derbi Minhoto' nunca deja indiferente a nadie y esta vez no ha sido excepción. Hubo intensidad, emoción, tensión, equilibrio, pasión e incluso tres expulsiones en el Estadio Municipal de Braga, es decir, casi todos los ingredientes necesarios para vivir un derbi perfecto. Pero a pesar de estos ingredientes, fruto de la rivalidad entre los dos conjuntos, le faltó lo más importante de todo: los goles.

Los primeros 45 minutos prometían una gran segunda mitad

Aunque los aficionados que estuvieron en Braga presenciando el partido no pudieron celebrar ningún gol en la primera parte disfrutaron de las varias oportunidades de gol que tuvieron tanto os bracarenses como os vimaranenses. Fue el equipo local el que empezó llevando más peligro, sobre todo por la banda izquierda con un Rafa Silva en un gran momento de forma y un Éder participativo.

Tras unos primero quince minutos donde tuvieron algunas dificultades para frenar el ataque rival los de Rui Vitória consiguieron hacerse con la pelota y a partir de ahí acercarse a la portería de Matheus. Así fue como Hernâni a pase de André André estuvo cerca de marcar cuando disparó a puerta en el minuto 25 aunque apareció Aderlan Santos para despejar el balón de cabeza cuando parecía que se colaba por la esquadra del lado izquierdo. Esta ocasión, junto a una en el 15' de Alex que obligó a Matheus a sacar lo mejor de sí, fueron dos de las más peligrosas de los primeros cuarenta y cinco minutos, unos 45 minutos que daban a creer que habría algún que otro gol durante el partido.

Foto: zerozero.pt
Foto: zerozero.pt

No todo fueron oportunidades para los visitantes, aunque sí las más claras, y es que el Sporting de Braga logró crear peligro sobre la portería de Assis con centros desde la banda buscando a los hombres de arriba, Éder en especial, que muchas veces acababan en córner como se dio a la media hora del encuentro cuando el Braga ejecutó tres saques de córner en menos de dos minutos.

Tanto Sérgio Conçeicao como Rui Vitória llegaron al descanso con uno de sus tres cambios realizados ya que en el 24' el técnico vimaranense realizó la primera substitución cuando Jonathan Alvez se marchó en camilla para dar entrada a Tomané mientras que el entrenador de os guerreiros do Minho tuvo que meter a Pedro Santos por Tiago Gomes que se marchó lesionado. De esta forma los dos técnicos se vieron obligados a realizar un cambio por lesión, fruto de la gran intensidad con la que los jugadores vivieron el choque.

El empate a cero se hizo más claro con el paso de los minutos

Al descanso el empate parecía lo más justo, eso sí, un empate de uno o dos goles. Pero con el pasar de los primeros minutos de la segunda mitad se hizo cada vez más visible el empate sin goles final. Los dos equipos estuvieron muy bien defensivamente, igual que en la primera parte, pero tuvieron dificultades a la hora de acercarse a Matheus por una parte y Assis por otra.

El SC Braga dejó de combinar, no lograba llegar a la línea de fondo, Éder desapareció entre la defensa rival y solamente Rafa Silva, con algún desequilibrio puntual por la banda izquierda, llevaba el peligro en ataque. Por su parte el Vitória SC bajó su ritmo de juego y no consiguió poner en apuros a Matheus como lo había hecho en la primera parte y había momento del partido donde parecía que se conformaba con regresar a Guimarães sumando un punto en el Estadio AXA.

La tensión se apoderó de los jugadores

Cuando parecía que el 'Derbi do Minho' iba a terminar con un reparto de puntos llegaron los últimos diez minutos. Durante los primeros ochenta minutos Carlos Xistra, el colegiado luso encargado de poner orden, había mostrado ocho tarjetas amarillas, un número de cartulinas aceptable teniendo en cuenta la rivalidad y el desarrollo del partido.

Foto: zerozero.pt
Foto: zerozero.pt

Los que no fue aceptable fue la actitud de los dos equipos a partir del minuto ochenta; las pérdidas de tiempo, las protestas, la dureza y los nervios se juntaron para convertir los últimos minutos en todo menos un espectáculo del fútbol portugués como a priori tiene que ser un encuentro de tal calibre.

Primero el Vitória de Guimarães con constantes pérdidas de tiempo, segundo el Sporting de Braga con sus protestas exageradas al colegiado, después Bruno Gaspar con una dura entrada sobre Rafa Silva que le hizo recibir su segunda tarjeta amarilla y por último un lance protagonizado por Salvador Agra y Hernâni, donde el futbolista lisboeta exageró un choque de cabezas con el futbolista del Braga haciendo que los dos fueran mostrados la cartulina roja, acabaron por dejar un mal sabor de boca a sus técnicos y aficionados.

Finalmente, el colegiado pitó el final de encuentro al consumirse los cuatro minutos de descuento que había añadido. El Sporting de Braga se coloca quinto con este punto y ya suma 22 mientras que su rival, el Vitória de Guimaraes, pierde su plaza en la segunda posición y baja a la tercer lugar con 27 puntos.