Las manos de Gottardi señalan el camino a Jamor

El fútbol es un estado de ánimo, y si no que se lo digan a Nacional. Si en Liga el equipo de Manuel Machado pinta bastante mal y tiene serios problemas para no quemarse y entrar en puestos de descenso, esta noche la Taça de Portugal le va a servir para olvidarse de la principal competición doméstica. Y sabe mejor si la derrota se la lleva el otro equipo importante de la isla, Marítimo, en su propio y semi estrenado estadio. Los de Choupana han vencido en la tanda de penaltis tras el 1-1 del partido y se han metido en las semifinales de la 'Prova Rainha'.

Ningún equipo quería tirar la oportunidad de estar entre los cuatro mejores del torneo, por lo que tanto Pontes como Machado no se guardaron nada. Los locales tenían en el campo a Maazou, Dyego Sousa, Fernando Ferreira o Bruno Gallo, autor de uno de los golazos de la pasada jornada. Por su parte, los visitantes tampoco se quedaban cortos con Mario Rondón, Marco Matías o los debutantes Christian y Luís Aurélio.

Primera parte muy igualada y con mucho miedo

El partido arrancaba y ni Marítimo ni Nacional quisieron tomar la iniciativa. Si Marítimo ya venía utilizando en las últimas jornada el 4-4-2, Nacional hoy también utilizaba esta disposición táctica, haciendo pruebas para el campeonato liguero. El duelo estaba muy equilibrado en la zona central del campo, pero eran los de Choupana los que tenían algo más de posesión.

Marítimo no podía mostrar su juego por la alta presión de los visitantes. Antes ya había avisado Christian de Nacional con un buen lanzamiento de falta y Maazou con un disparo desde el punto de penalti que se fue alto. Pero en una jugada en el área nacionalista, el balón golpea involuntariamente en el brazo de Ali Ghazal mientras se daba la vuelta y el árbitro, con algo de dudas, pitó la pena máxima. Bruno Gallo lanzó y enganó por completo a Gottardi, algo que no volvería a ocurrir muchas más veces. Gol y 1-0 para los locales.

Bruno Gallo puso por delante a Marítimo

Con la balanza decantada para el equipo local, el partido siguió su curso: duelos igualados y pocas ocasiones para ser un derbi. Un disparo potentísimo de Saleh Gomaa que se marchó rozando la portería de Salín fue lo más peligroso de la primera parte desde el gol local. Hasta el descanso el partido era eso, por lo que los dos equipos necesitaban dar un poco más en el campo para buscar sus objetivos, uno cerrar el partido y otro empatarlo.

Nacional empató el partido a la vuelta de los vestuarios

Tras el descanso, el partido tuvo otra cara. Al minuto de la reanudación, Bauer agarró a un rival en el pico del área y eso le costó el penalti a su equipo. Marco Matías fue el encargado de lanzar y transformar con potencia el libre directo, llevando el empate al Estádio dos Barreiros. Tras volver a campear el empate, ambos equipos volvieron a ser más fríos y a ver qué hacía el rival para deshacer la igualada. El partido entró en un periodo de dureza, cartulinas amarillas e interrupciones que hizo que no hubiera ocasiones en más de diez minutos, hasta que João Diogo subiera su banda y disparara a las manos de Gottardi.

En las contadas ocasiones de ambos equipos era Nacional el que quizás llevara más peligro. De hecho, a punto estuvo de darle la vuelta al marcador gracias a un lanzamiento lejano de falta del debutante Christian que tuvo que salvar Salin con una mano prodigiosa. Al rechace sin portero no fue capaz de llegar un atacante de Nacional y se anticipó la defensa local. Tras esto, los últimos diez minutos de partido fueron un trámite donde tanto Nacional como Marítimo ya pensaban en los que sería los últimos 30 minutos de juego.

La prórroga no resolvió nada y Gottardi fue el héroe en la tanda

Marco Matías, también de penalti, puso el 1-1 definitivo

Los 30 minutos del tiempo extra no deshicieron el empate que dominaba el marcador de los Barreiros. La prórroga empezó con ambos equipos muy calientes, a sabiendas de que el final se acercaba y de que se estaban jugando mucho. Ahora era Marítimo el que tenía más el balón, pero sin llegar al área de Nacional. Hubo una ocasión para cada equipo en los primeros quince minutos de prórroga: un remate de Lucas João que atrapó Salin y un disparo de Fransérgio desde fuera del área que provocó la gran estirada de la noche de Gottardi.

Salin tampoco quiso quedarse corto de protagonismo, y al arrancar la segunda mitad de la prórroga, en un mano a mano con Rondón, sacó un pie prodigioso que bien pudo valerle a su equipo el pase a las semifinales, aunque no fue así. La última la tuvo Tiago Rodrigues con un lanzamiento lejano que se estrelló en la mismísima escuadra.

Los penaltis eran inevitables. Los cuatro primeros fueron transformados, hasta que en el quinto Mario Rondón no pudo superar a Salin. Aquí comenzaba el recital de Gottardi en la tanda de penaltis. Con Marítimo pudiéndose poner por delante, el guardameta de Nacional paró el penalti al capitán Danilo. Con el 4-4, Salin paró el penalti a Rui Correia, pero Gottardi no se quedó atrás tras parar el penalti de Xavier. Con el gol de João Aurélio, Marítimo debía marcar para seguir vivo en la 'muerte súbita', pero se iba a topar con un muro. Gottardi paró el penalti de Ramsteijn, su tercer penalti detenido, y corrió hacia donde estaban los aficionados de Nacional para celebrar el pase a semifinales, donde les espera Sporting de Portugal a doble partido en la lucha por el pase a Jamor, lugar de la final de la Taça de Portugal. A seguir soñando...

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