El fútbol ruso se puso de luto futbolístico hace un par de días cuando desde el Rubin se dio a conocer la noticia de que el que hasta hace poco era uno de los entrenadores más clásicos del fútbol europeo, Berdyev, perdía su trabajo.

Haciendo un símil con el fútbol inglés, el Wenger o el Ferguson de Kazan, conocido también por vivir los encuentros con su tasbih en la mano, cogió al equipo situado en el segundo escalón del fútbol nacional y desde el 2001 hasta la actualidad ha logrado dos campeonatos, en 2008 y en 2009, y varios títulos y logros que completan una más que productiva era.

Ahora, más de diez años después de su llegada al banquillo tártaro, deja al Rubin Kazan clasificado para los dieciseisavos de la Europa League, en los que se enfrentará al Betis, eliminado de la Copa rusa y situado lejos de los puestos que dan acceso a las competiciones europeas a pesar de ser el equipo menos goleado en lo que va de competición. 

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