Es la hierba de Wimbledon, pero nadie lo diría. Está la publicidad, que mancilla estas paredes legendarias, ahora púrpuras. Incluso los colores nacionales cosidos en la piel de los tenistas en detrimento del blanco señorial. Aquí, en un All England Club vestido para recibir los Juegos Olímpicos de Londres, las tradiciones se resquebrajan. Con esta metamorfosis, hasta los mejores son vulnerables. Lo demostró Roger Federer, que sudó tinta (6-3, 5-7 y 6-3) ante el colombiano Alejandro Falla. O el checo Tomas Berdych, finalista del grande británico en 2010, que cayó con estrépito (doble 6-4) frente al belga Steve Darcis. Algunos explican estos fenómenos como la magia de los Juegos. Como el espíritu olímpico. Ése que ayuda a superar imposibles. Como en el caso de Carla Suárez, que protagonizó una histórica remontada (3-6, 7-5 y 10-8) ante la australiana Samantha Stosur, la quinta favorita del torneo. La misma que la doblegó sin contemplaciones (6-1 y 6-3) hace unas semanas en el ortodoxo Wimbledon.

“A diferencia de entonces, no salí nerviosa”, explica la española, la número 45 del mundo. “Sí empecé cometiendo los mismos errores que había visualizado del partido de Wimbledon. Pero poco a poco he ido imponiendo mi juego y he llevado la iniciativa. Después de ganar el segundo set he visto que la remontada sería posible y así lo he intentado hasta el último punto”, continúa. Esa lucha, ese corazón de piedra, fue la causa del cambio. Al inicio del segundo parcial, el partido desembocó en una vorágine de sensaciones. Las rupturas brotaban sin esfuerzo. Y los errores (51 computó Stosur) pesaban como puñales en la espalda. Tanto como para sacar a la australiana del partido. Al final, superadas las 2 horas y 38 minutos de partido, fue la canaria la que cerró un partido que hizo suyo desde el control de las pulsaciones. Por tacto y cabeza.

De este modo, Carla se medirá en segunda ronda a Kim Clijsters, que apenas pasó apuros (6-1 y 6-4) ante la italiana Roberta Vinci. La belga, ex número uno y campeona en Wimbledon hace ya nueve años, apenas ha competido en lo que va de año por las lesiones. “Será muy complicado, muy duro. Pero ahora quiero descansar y mañana ya comenzaré a preparar el partido a conciencia”, comenta Suárez. Sabe que tiene otra dura papeleta antes de poder soñar con las rondas donde se deciden las medallas. “Parece que me han puesto el cuadro más difícil posible”, sentencia. Lo dice mientras otea el horizonte. Antes de la final asomarían Ana Ivanovic, María Sharapova o Petra Kvitova. Todo un reto para la buena de Carla.

RESUTADOS.

Primera ronda.

Serena Williams (USA/N.4) a Jelena Jankovic (SRB), 6-3 y 6-1.

Petra Kvitova (RCH/N.6) a Kateryna Bondarenko (UCR), 6-4, 5-7 y 6-4.

Carolina Woznicaki (DIN/N.8) a Anne Keothavong (GBR), 4-6, 6-3 y 6-2.

Daniela Hantuchova (SVQ) a Na Li (CHN/N.10), 6-2, 3-6 y 6-3.

Ana Ivanovic (SRB/N.11) a Christina McHale (USA), 6-4 y 7-5.

Tsvetana Pironkova (BUL) a Dominica Cibulkova (SVQ/N.12), 7-6(4) y 6-2.

Vera Zvonareva (RUS/N.13) a Sofia Arvidsson (SUE), 7-6(3) y 6-4.

Shuai Peng (CHN) a Su-Wei Hsieh (TPE), 6-3, 6-7(3) y 7-5.

Alize Cornet (FRA) a Tamira Paszek (AUT), 7-6(4) y 6-4.

Flavio Penetra (ITA) a Sorana Cirstea (RUM), 6-2, 4-6 y 6-2.

Urszula Radwanska (POL) a Mona Barthel (ALE), 6-4 y 6-3.

Elena Baltacha (GBR) a Agnes Szavay (BUL), 6-3 y 6-3.

Yanina Wickmayer (BEL) a Anabel Medina Garrigues (ESP), 6-2, 4-6 y 7-5.

Francesca Schiavone (ITA) a Klara Zakopalova (RCH), 6-3, 3-6 y 6-4.

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Sobre el autor
Adrián Peinado
Una alternativa al Periodismo de bar que colman la mayoría de los medios de comunicación de este país. Licenciado en Periodismo en la URJC en 2009 y en la agencia Europa Press desde ese año hasta finales de 2010.