Amistad y Muerte: los conceptos que más destacan en la obra de Stephen King
Composición y retoques Ana Mª Gil (Fotografías: Morguefile.com).

En otros autores, su fijación por determinados temas se explica por su bagaje personal o profesional, pero Stephen King es un autor que se ha limitado a tratar dos de los temas más generales y simples desde una perspectiva tétrica y, en ocasiones, excesivamente real. Quizá el principal ejemplo de esto lo tenemos en la crudeza de la historia corta “El cuerpo” (The Body) que fue adaptada al cine en la película “Stand by me” (Quédate conmigo). En esta historia cuatro amigos preadolescentes se escapan a vivir la aventura de encontrar un muerto. Durante el trayecto aprenderán sobre ellos mismos y sobre sus amigos y el valor de la amistad y finalmente descubrirán la crudeza de la muerte y la soledad. Lo que para ellos empieza como un juego termina como toda una experiencia de vida.

"Realismo y Oscuridad"

Para muchos, Stephen King es el maestro del terror, sin embargo, no todo lo que King ha escrito y/o le queda por escribir pertenece a este género. En cualquier caso, lo que si caracteriza su obra es el tratamiento realista y oscuro de sus personajes y situaciones. Situaciones que rallaban la realidad hasta tal punto en algunos casos que parecían premonitorias lo que ha  llevado a muchos de sus seguidores a creer que King tiene poder sobrenaturales o clarividentes, algo que el autor siempre desmiente pero que para las editoriales ayuda, en ocasiones, a vender más libros.

Una de las situaciones que más ha dado que hablar en ese sentido fue el accidente de coche que sufrió en 1999 que utilizó para la descripción de un accidente mortal en la historia corta “Buick 8: Un coche perverso” (From a Buick 8). Esta historia fue escrita a posteriori del suceso, sin embargo, muchos consideran que él sabía desde hacía tiempo que tendría un accidente de coche terrible pues ya hacía años que había escrito “Misery”, novela en la que describía como un escritor tiene un accidente de coche. Sin embargo, en dicha historia los detalles del accidente no son tan escabrosos ni tan específicos como lo son los que da a partir de su incidente real sobre todo para la serie de televisión “Kingdom Hospital” donde un pintor tiene un accidente idéntico al suyo.

Rarezas y supersticiones a parte, lo que realmente es Stephen King es un autor que retrata el mundo y sus visiones del mundo se basan sobre todo en la relaciones entre las personas o la falta de las mismas.

"No hay finales felices"

Muchos amantes del terror quisieran verle escribir un libro con su mayor competidor de en este género: Dean Koontz. Sin embargo, como el propio escritor ha señalado en alguna ocasión, eso sería imposible, puesto que Koontz crea historias que generalmente acaban en final feliz mientras que King tiene la necesidad de dejar que la historia fluya de manera natural para morir de la misma manera partiendo de personajes cuya vida no es precisamente un jardín de rosas. No sería pues descabellado describir la literatura de Stephen King como una retórica hiperrealista, donde muestra mundos en los que lo paranormal tiene cabida pero cuyas historias evolucionan de un modo racional y si el final feliz no es factible, este no se dará.

King es uno de esos escritores que utiliza sus vivencias y las de los demás para describir todo tipo de situaciones que le pasan por la cabeza. Es un escritor desde que se levanta hasta que se acuesta, y a sus más de sesenta años -nació en 1947- no tiene intención de retirarse con más de cincuenta obras a sus espaldas y trabajos para cine, televisión y novela gráfica.

"Poe, Lovecraft y la Muerte son sus inspiraciones"

Entre toda esta producción narrativa, destaca en los últimos años la saga de “La Torre Oscura” (The Dark Tower) donde despliega su concepto más surrealista del mundo y que ya se intuía en historias cono “Corazones en la Atlántida” (Hearts in Atlantis). En este tipo de narrativa, la influencia de autores cono H.P. Lovecraft es muy evidente, entrelazando historias sin relación inicial o incorporando material documental ficticio para apoyar las teorías al igual que el autor clásico hiciera con el famoso “Necronomicon” que muchos llegaron a creen real, llegando a solicitarlo en bibliotecas y librerías. 

Otra de las cosas que destacan en la narrativa de King es su crudeza verbal. Otros autores, sabiéndose en un mercado donde los que más leen son personas con cierta cultura y refinamiento, evitan el uso de lenguaje malsonante o lo reducen a expresiones básicas o de lo más generales. Pero Stephen King no tiene miedo de hacer que sus personajes hablen como lo haría alguien de su entorno, e incluso no tiene ningún problema en hacer que gente culta se exprese con exabruptos. Su vocabulario es realista y rico al mismo tiempo, lo que permite apreciar matices y diferencias en el lenguaje que utiliza en función del origen social de los personajes que con él se expresan.

Y si Lovecraft es una influencia en su obra, no es extrañar que en alguna ocasión también haya reconocido que le gusta la obra de J.K. Rowling. El tema central de la obra de esta escritora es por antonomasia la muerte y ese es el tema definitivo del que trata la obra de King, pues al hablar de la vida es inevitable cerrar el ciclo con la muerte, como ya se ha visto al comienzo de este artículo. La otra gran influencia de este autor sería sin duda Edgar Allan Poe, al que homenajea en obras como “El resplandor” (The Shining). Su punto común sería la idea de ese lado oscuro o gemelo malvado, recurso literario conocido como Doppelgänger  que puede representarse tanto a nivel espiritual, dualismo interior, como físico, personaje idéntico y moralmente inverso. Un ejemplo muy claro de este dualismo espiritual se ve en historias como “Duma Key” donde el protagonista se siente poseído por el mal pero no deja de ser el mismo en el fondo con su propia personalidad y será la amistad lo que ayudará a que un final fatal no desemboque en algo todavía peor y el mal sea vencido, aunque tarde, pues la muerte, de una forma u otra, siempre gana la partida.

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