La maestra y periodista Maeve Binchy ha escrito más de una veintena de libros, la mayoría de los cuales están ambientados en Irlanda. De ellos se han vendido más de cuarenta millones de copias por todo el mundo y su autora ha recibido importantes premios.
Su última novela, Una semana en invierno, publicada de forma póstuma tras la muerte de la autora en 2012, ha sido un éxito de ventas tanto en Irlanda como en el extranjero.
En él, Maeve Binchy transporta al lector a Irlanda donde conocerá a Chicky, una mujer que, tras vivir casi toda su vida en EEUU, decide regresar a su Irlanda natal con intención de hacer allí realidad los sueños que se vieron truncados en América.
En Stoneybridge, el pueblecito costero que la vio crecer, Chicky reforma la casa del acantilado hasta convertirla en un maravilloso hotel especializado en vacaciones invernales. Sus grandes chimeneas, acogedoras habitaciones e increíble situación geográfica harán del Stone House un lugar de encuentro entre un grupo de personas que, por un motivo u otro necesitan urgentemente ver la vida con claridad y descansar para poder salir de esa encrucijada donde han llegado sus vidas.
De esta forma, aparte de Chicky, conoceremos a una joven pareja que guarda un terrible secreto, a una profesora amargada y recién jubilada, a una vidente o a un joven problemático que parece que ya ha sentado cabeza.
La novela está dividida en varios capítulos en cada uno de los cuales conocemos a un personaje, su vida, su historia y la forma en la que ha llegado a Stoneybridge. Son historias independientes que nos acercan a las formas de pensar, de sentir, a las esperanzas y a los sueños de todos los huéspedes. Esto permite al lector entender, tras la forma sencilla y cercana en que la autora narra sus vidas y sus experiencias, el comportamiento de unas personas que en principio pueden parecer tristes, enfadadas, calladas o tímidas en el hotel.
Y es que en esta novela queda claramente plasmado que lo que se aprecia a primera vista es solo un reflejo de todo lo que hay detrás, de toda la historia que se ha vivido y que hace a la gente ser y comportarse como lo hacen.
Estas pequeñas historias narran los sucesos más importantes de la vida de sus protagonistas, vidas cotidianas pero excepcionales e inconclusas ya que al terminar cada historia Binchy deja al huésped ante un nuevo comienzo.
Todas estas interesantes vidas de los huéspedes que se mezclan y entrecruzan hasta unirse en el hotel tienen como telón de fondo el impresionante paisaje irlandés, que a pesar de ser tan frío y de su humedad constante es el ambiente ideal para relajarse, pensar y disfrutar de una agradable estancia de una semana (o más) en invierno.
