El próximo marzo se prevé que la WSA (Asociación Mundial de Natación) de a conocer las fechas y sedes para su circuito mundial, que han denominado “Ring of Fire”. Pese a que el reglamento de la FINA, organismo que gobierna la natación a nivel mundial, prohiba a los nadadores participar en eventos o competiciones creadas por asociaciones no afiliadas a ella.

Antecedentes similares en el del patinaje

No obstante, ya ha habido un precedente con la misma situación. La Unión Internacional de Patinaje sobre Hielo también prohibía la participación en competiciones de organizaciones no relacionadas con la asociación. Pero la Comisión Europea ha dictaminado que la normativa de dicha asociación no cumple las normas de la Unión Europea en lo que ha competencia se refiere. La WSCA (afiliada a la WSA) ha pedido a la FINA que quite esa norma “La WSCA apoya la decisión de la Comisión Europea. Los atletas profesionales deben tener la libertad de practicar su profesión sin ser rehenes de un monopolio internacional”. De lo contrario, deberá “afrontar una resolución similar en los tribunales“.

La Asociación Mundial de Natación nació en 2016 con el objetivo de proponer una alternativa frente a la todopoderosa FINA. La cual ha recibido recientemente numerosas críticas por su gestión. Se dio a sí misma el plazo de dos años para hacerse con el control de la natación y las aguas abiertas. Sus cimientos se acordaron en Cleveland por la Asociación Mundial de Entrenadores de Natación y la ASCA. Recibiendo el apoyo más de 650 entrenadores, y siendo promovida por dos de ellos: Bill Sweetenham y John Leonard

Solo el 5% del presupuesto de la FINA va a los nadadores

La nueva asociación apuesta por otorgarle el protagonismo a los nadadores (la ‘bureau’ de esta estará formada en su mayoría por nadadores y entrenadores) y por la máxima transparencia. Además, nace como solución a las principales quejas que se le han hecho a la FINA, por ejemplo el escaso presupuesto que esta le dedica a los nadadores (tan solo el 5% según la WSA).

En relación con este último dato, John Leonard arremetió contra la Federación Internacional y el COI a través de un artículo en Swimvortex diciendo que: “Se han convertido en una máquina financiera que genera miles de millones de dólares a costa de los deportistas”.  John llama a los deportistas a “unirse, formar su propia asociación y decirle al COI bajo qué condiciones participarán en el circo“.

Esto y que la WSA anunciara que iba a destinar el 49% de sus ingresos a los premios de los nadadores hicieron que la Federación Internacional tuviera que mover ficha. Lo que hizo fue aumentar los premios de los nadadores para el pasado mundial de piscina corta.

Katinka Hosszu encabeza la ‘revolución’ de los nadadores

Una de las primeras en unirse a esta ‘revolución’ es uno de los pesos pesados de este deporte, Katinka Hosszu. La húngara ha publicado en su perfil de la red social Facebook una carta apoyando el boicot para intentar presionar a la FINA a que lleve a cabo ciertos cambios. “Mientras el mundo ve a los nadadores como un ejemplo de profesionalismo y disciplina, nuestros líderes piensan que nuestro deporte es amateur, por lo tanto somos amateurs, y así es como nos tratan. (...) Si quieres ser nadador en 2017, una cosa debes tener claro: invertirás más de lo obtendrás. ¿Suena atractivo? La respuesta es no. ¿Podríamos hacerlo más atractivo? Estoy segura de que podemos, siempre y cuando la FINA nos ayude…”.

Katinka Hosszu en el campeonato de Windsor/ FINA
Katinka Hosszu en el campeonato de Windsor/ FINA

Katinka llama a sus compañeros a “luchar unidos” y añade: “Creo firmemente que la natación puede ser un verdadero deporte profesional, pero para esto debemos romper la mentalidad de décadas anteriores. Los líderes de la FINA, en lugar de defender los intereses de los nadadores, se centran exclusivamente en complacer sus propios intereses comerciales como si estuviéramos en 1989 y no en 2017”. A Hosszu le han afectado directamente los cambios que la Fina ha introducido para los mundiales de piscina corta, limitando el número de pruebas en las que puede participar cada nadador. Sin embargo, ella asegura que no lo hace solo por ella, sino “por las próximas generaciones”.

Todavía no hay nada claro respecto a la próxima competición de la WSA, lo que si es seguro es que está decidida a plantarle cara a la FINA hasta el final.