Se suele decir que el deporte no entiende de justicia. Esta vez, sin embargo, no ha podido ser más justo. Henrik Stenson, que venía de jugar de manera excelsa los últimos tres meses, ha conseguido su primera victoria del año en el Deutsche Bank Championship. El sueco ganó con cierta autoridad tras completar los 72 hoyos del recorrido del TPC de Boston con 262 golpes (-22), dos menos que su más inmediato perseguidor, el estadounidense Steve Stricker.

Stenson entregó una tarjeta de 66 golpes (-5) en la última jornada, resultado que le sirvió para desbancar al líder del torneo al término de la segunda y tercera jornadas, el español Sergio García. El día no fue tan cómodo como los anteriores y no se vieron vueltas tan bajas. El principal problema para los jugadores fue adaptarse a la velocidad de unos greenes que se vio afectada por una tormenta que retrasó el inicio de la jornada, e incluso obligó a detener el juego durante unas dos horas.

Pese a que la victoria pudiera parecer cómoda, las cosas no comenzaron del todo bien para Stenson. El sueco arrancó cometiendo un bogey en el par 5 del 2 (uno de los hoyos más fáciles del campo) tras mandar su segundo golpe al obstáculo de agua. Pero este fue su único error en la vuelta, y después vendrían seis birdies (tres de ellos de forma consecutiva en los agujeros 4, 5 y 6) que le catapultaron hasta un -22 inalcanzable para el resto de golfistas.

En segunda posición terminó Steve Stricker (-20), mientras que el canadiense Graham DeLaet fue tercero con -18. La gran decepción del día la protagonizó Sergio García. El castellonense partía desde el liderato con dos golpes de ventaja sobre Stenson, pero, sobre todo, había mostrado un gran nivel de juego en las tres primeras jornadas. Sin embargo, pronto se le torcieron las cosas. Su mejor arma durante toda la temporada, el putter, le falló en el peor momento posible.

En el hoyo 1 Sergio tuvo que embocar un putt de par de unos tres metros tras quedarse muy corto en su primer putt. En el 2, se pasó tres metros de bandera en su intento de birdie y no fue capaz de materializar el putt de par. Primer bogey del día y malas sensaciones que se agudizaron con una pésima salida desde el tee del 4. La bola acabó entre unos arbustos y Sergio cometió el segundo bogey del día. Un birdie en el hoyo 5 parecía que podía revertir la situación, pero un nuevo bogey en el par 5 del 7 y otro en el 9 después de hacer tres putts enterraron todas sus opciones. Los nueve segundos agujeros fueron algo mejores, sobre todo, los cuatro últimos. En dichos hoyos tuvo buenas opciones de birdie, de las cuales materializó dos, pero también tropezó en el hoyo 14. Al final, vuelta de 73 golpes (+2) para un total de -17 y un cuarto puesto que sabe a muy poco. Sin embargo, este resultado le ha metido de lleno en la lucha por la FedEx Cup (ahora mismo ocupa el puesto 24) y le ha permitido ascender hasta la decimoséptima posición del ranking mundial.

Precisamente Henrik Stenson es el nuevo líder de una FedEx Cup de la que todavía quedan por disputar dos torneos: el BMW Championship y el Tour Championship. Además, con este triunfo el sueco se ha situado como número 6 del mundo. Y es que su temporada está siendo para enmarcar: 9 top tens (incluyendo la victoria en el Deutsche Bank, el segundo puesto en el Abierto Británico, el tercer puesto en el PGA Championship, el quinto en el The Players y el segundo en el Bridgestone Invitational) y líder de la Carrera a Dubai. Posiblemente, estemos ante el golfista más en forma del mundo.