En una de sus semanas más difíciles a nivel personal (tras anunciar la suspensión de su compromiso con la tenista Caroline Wozniacki), Rory McIlroy se ha desquitado a lo grande con su triunfo en el BMW PGA Championship. Todo parecía estar en su contra: seis meses sin ganar, caída en el ranking mundial, juego irregular y siete golpes de desventaja respecto al líder en el arranque de la última jornada. Sin embargo, el norirlandés se ha sobrepuesto a todas estas dificultades y, con la mejor vuelta del día (66 golpes), se ha impuesto con un golpe de ventaja sobre Shane Lowry.

El torneo parecía visto para sentencia tras la exhibición de Thomas Björn en los nueve hoyos finales de la tercera vuelta. Siete birdies en ocho hoyos (seis de ellos consecutivos) le daban al danés cinco golpes de ventaja sobre su máximo perseguidor, Luke Donald. No obstante, ninguno de los dos estuvo a la altura en la jornada final, especialmente Björn, quien terminó con una vuelta de 75 impactos (+3). El triple bogey que ambos firmaron en el hoyo 6 les frenó por completo y abrió el torneo a otros aspirantes, quienes aguardaban expectantes.

Entre esos jugadores que esperaban el tropiezo de los de arriba estaba Shane Lowry, quien fue líder del torneo durante buena parte de la jornada, pero un doble bogey en el 14 le penalizó en exceso. Su vuelta de 68 golpes (-4) fue insuficiente para ganar, pero, al menos, le sirvió para acabar segundo en solitario con -13, a un solo impacto del vencedor.

McIlroy, -5 en los nueve últimos hoyos

El otro tapado era ni más ni menos que Rory McIlroy, quien se mantenía en la pelea, aunque no asomaba en exceso por la parte alta de la tabla. Al menos, hasta los nueve últimos hoyos, esos en los que se deciden los torneos. En esa parte del recorrido de Wenworth, el norirlandés marcó la diferencia con cinco birdies sin error para terminar con una vuelta de 66 golpes (-6) y un resultado acumulado de -14, inalcanzable para Björn y Donald, quienes terminaron con -12 en tercer puesto.

El BMW PGA Championship es el sexto torneo que gana McIlroy en el circuito europeo y el primero en suelo europeo (los otros cuatro se reparten entre Asia y Norteamérica). El norirlandés suma ya 12 victorias en su carrera como profesional y vuelve a ganar en un circuito importante 18 meses después (aunque en diciembre de 2013 conquistó un torneo en el circuito australiano).

Pablo Larrazábal, clasificado para el US Open

Dos españoles afrontaban la última jornada con opciones de victoria, pero ninguno de ellos estuvo en la lucha final. El mejor acabó siendo Pablo Larrazábal, quien con una vuelta de 71 golpes (-1) concluyó en séptima posición con un acumulado de -8. Pese a quedar algo alejado de la cabeza, este resultado le sirve al catalán para ingresar en el top 60 del ranking mundial, lo que le da acceso directo al US Open que se disputará del 12 al 15 de junio en Pinehurst.

Rafa Cabrera Bello, por su parte, terminó en el puesto 16 con un acumulado de -6, mientras que Miguel Ángel Jiménez lo hizo en el puesto 35 con -1. Eduardo de la Riva acabó en el puesto 46 con +1, Carlos del Moral en el 54 con +2, Álvaro Quirós en el 57 con +3, y Adrián Otaegui y Jorge Campillo lo hicieron en el puesto 63 con +5.