En tres eventos paralelos que tuvieron lugar a las 3 de la madrugada hora española, del miércoles 4 de septiembre en tres puntos distintos del mundo (Tokio, Monterey y Barcelona) que pudieron seguirse en directo vía inline y que mantuvieron despierto a más de uno, se presentó la cuarta generación del Mazda Miata, nuestro MX-5.

El mítico roadster nipón, que este año ha cumplido 25 años y que en todo este tiempo ha cautivado a millones de personas, se renueva una vez más manteniendo la misma filosofía que lo convirtió en un éxito a principios de la década de los 90 y que se mantiene hasta día de hoy.

Estéticamente se ha cambiado el aspecto femenino y redondeado habitual por un aspecto más imponente y afilado con la introducción del diseño ‘Kodo’ (alma del movimiento) de Mazda. Un frontal muy bajo con unos faros pequeños y rasgados, la entrada de aire esta vez más grande y angulosa, y dos pequeñas tomas laterales le conceden esta imagen agresiva.

Mazda MX-5 (Imagen: Mazda)

La trasera, sin embargo, es más alta y en ella llama la atención los pilotos, que pierden la tradicional forma ovalada, aunque puede intuirse una desestructuración de esas clásicas ópticas en cuyo interior destacaba la forma circular de la luz. Además los pilotos se encuentran “incrustados” en la carrocería lo cual da sensación de anchura y gordura. Las luces de marcha atrás van situadas en la parte inferior del parachoques adaptándose al diseño de la zaga. Respecto al modelo inmediatamente anterior pierde las salidas de escape a cada lado por dos salidas juntas en el lado derecho, menos pretenciosas.

El interior recuerda mucho al del nuevo Mazda 2, con el que comparte bastantes elementos del salpicadero, como los aireadores, los mandos del climatizador o la pantalla táctil situada en la parte superior y que permanece fija. En general es bastante simple, pero es que en este coche las florituras importan poco, porque lo realmente importante al entrar en su interior es sentarse, bajar la capota, arrancar y disfrutar conduciéndolo por bonitas carreteras viradas.

Interior Mazda MX-5 (Imagen: Mazda)

Cien kilos más ligero y ahora con el motor por detrás del eje delantero lo harán sin duda más divertido.

El nuevo MX-5 va montado sobre una nueva plataforma que compartirá con el grupo FIAT para un modelo de iguales características pero con sabor italiano, lo que conlleva un importante ahorro de costes. El tamaño en esta nueva generación se ha visto reducido, teniendo una longitud algo menor que los modelos anteriores, quedándose en sólo 3,915 metros. La anchura, eso sí, con 1,730 metros es mayor que nunca, y la altura se reduce mínimamente respecto a su antecesor hasta los 1,235 metros.

Una de las cosas más destacable es la reducción de unos 100 kilos de peso a la que han sometido al Miata y que lo hacen rondar la tonelada de peso, a falta de conocerse la cifra oficial. Este considerable adelgazamiento seguro se hará notar en sus prestaciones y ha sido posible, aparte de a la reducción de tamaño, al empleo de aluminio en diversas partes de la carrocería o a la capota de lona más ligera.

Otra mejora, que también se hará notar, ha sido el desplazamiento del motor hacia el centro del coche, estando ahora en posición central delantera al situarse por detrás del eje. Con la tracción como siempre atrás, el reparto de masas se ha logrado que quede en un perfecto 50:50.

Esquema Mazda MX-5 (Imagen: Mazda)

Los propulsores disponibles serán dos gasolina de inyección directa y de aspiración natural, el 1.5 SkyActiv-G con 131 cv y el 2.0 SkyActiv-G entregando 160 cv, que irán acoplados a una caja manual de seis velocidades, aunque opcionalmente se podrá elegir con cambio automático.

Hasta dentro de unos meses no se pondrá a la venta y se espera que, además de con techo de lona, se ofrezca una versión con techo rígido retráctil. Este y otros datos se conocerán en el Salón de París, dentro de un mes aproximadamente, donde sin duda será uno de los que más furor cause. Los precios que aún tardarán en conocerse, se espera que mantengan al MX-5 en su línea de roadster asequible.

Mazda MX-5 (Imagen: Mazda)