Las versiones deportivas de Ford siempre son de las más esperadas entre los aficionados al mundo de los coches. Su legado, que alcanza hasta nuestros días, nos deja auténticos hitos automovilísticos heredados de su tradición en los rallyes.

Ayer se presentó la versión RS de la tercera generación del Focus en la sede europea de Ford, situada en la ciudad alemana de Colonia. En el evento hubo un bonito desfile, a modo de repaso histórico, de todos los modelos de la división RS, y tampoco faltó el piloto Ken Block con una de sus famosas gymkhanas a bordo del ansiado modelo, todavía cubierto con camuflaje. Precisamente el piloto estadounidense ha colaborado como asesor en el desarrollo del proyecto.

Ford Focus RS (Imagen: Ford)

El corazón de la bestia es el 2.3 EcoBoost del Mustang, desarrollando más de 320 caballos y acoplado a una caja de cambios manual.

Por fin se desveló y pudimos observar el tratamiento exterior recibido, que advierte de que el coche ante el que nos encontramos no es un Focus cualquiera; algo muy útil para los conductores que se encuentren con uno parado justo al lado en un semáforo.

El frontal es muy agresivo, con una dimensionada entrada de aire cubierta por una fina rejilla que deja entrever el enorme intercooler del motor en la parte inferior, y otras dos tomas junto a los antinieblas encargadas de refrigerar los frenos. La zaga incorpora un alerón y un gran difusor en el parachoques con dos amplias salidas de escape integradas a los lados, mientras que en el centro se sitúa la luz antiniebla.

Se echa mucho en falta, sin embargo, una carrocería ensanchada con unas aletas más grandes en los pasos de ruedas, es decir, a lo que Ford nos tenía acostumbrados con los anteriores Focus RS. Aquellos parecían casi sacados de un tramo del Rally de Montecarlo. Otro punto negativo para muchos, son las cinco puertas con las que cuenta el modelo, y es que en esta generación no ha existido versión de tres.

Ford Focus RS (Imagen: Ford)

Pero lo realmente importante de este coche se esconde debajo. El motor es el 2.3 EcoBoost que utiliza el Mustang en Europa como nivel de acceso, aunque en este caso aún no tenemos información de la potencia exacta que desarrollará. Lo que sí sabemos es que no se quedará corto, ya que Ford anuncia que serán más de 320 los caballos. Muchos hablan de que la cifra final será 350.

El propulsor, no obstante, ha recibido algunas mejoras. La culata está fabricada a partir de un material de aleación para que pueda soportar mayores temperaturas, y va montada sobre una junta más robusta. El bloque de cilindros emplea camisas de fundición de acero de mayor resistencia, el turbo se ha sustituido por otro con un compresor mayor y el sistema de admisión es menos restrictivo.

La caja de cambios que irá acoplada al motor será manual de 6 velocidades, las cuales se accionarán con una palanca más corta. Está claro que Ford apuesta por la diversión al volante del Focus RS ofreciendo este tipo de cambio, que cada vez es menos habitual en coches de este tipo y que en muchos casos se echa de menos.

Esquema Ford Focus RS (Imagen: Ford)

El punto más destacado, junto con la cifra de caballos, es el sistema de tracción total con control vectorial de par, que se encargará de transmitir la potencia al asfalto a través de las cuatro ruedas de manera mucho más efectiva. Esto es algo que ya se pedía a la anterior generación y que a muchos defraudó, por lo que a este nuevo modelo no se le hubiese perdonado que la transmisión corriese únicamente a cargo del tren delantero.

Este Focus RS cuenta con tracción 4X4, lo que se traduce en una evolución en el aspecto dinámico.

La suspensión se ha rebajado y se ha aumentado su rigidez, a la vez que la dirección se ha mejorado para ser más rápida, directa y con un mejor tacto. Los neumáticos propuestos para calzar a la nueva bestia del óvalo son los Michelin Pilot Super Sport con medidas 235/35, aunque opcionalmente se podrá adquirir con los semi-slicks Pilot Sport Cup 2.

Las llantas multirradio de color gris oscuro que van montadas en los neumáticos tienen un tamaño de 19 pulgadas y cada una ahorra un kilogramo por rueda al peso del coche.

Interior Ford Focus RS (Imagen: Ford)

En el interior, se han añadido tres relojes adicionales situados por encima del salpicadero que indican la presión del turbo, la temperatura del aceite y la presión de este. El volante se ha achatado por la parte inferior y se ha forrado con cuero perforado en la zona de sujeción, lo que le da un toque más deportivo. Las costuras por toda la tapicería son del color azul y el logo de RS aparece en distintas partes del habitáculo. Opcionalmente se podrán montar unos interesantes asientos de tipo baquet firmados por Recaro.

Cuatro serán los colores en los que se podrá elegir el Focus RS. Uno de ellos es el exclusivo azul ‘Nitrous blue’ de cuatro capas del coche de las fotos, y las otras opciones son el gris ‘Stealth grey’, el negro ‘Shadow black’ y el blanco ‘Crystal’. En esta ocasión la paleta de colores no incluye el llamativo verde del modelo anterior, tan amado y odiado a partes iguales.

El próximo mes de marzo en el Salón de Ginebra, donde debutará oficialmente, se conocerán todos los datos. Su producción no se iniciará hasta finales de este año en la factoría de Saarlouis, por lo que no llegará a los concesionarios hasta 2016, y cuando lo haga será el primer modelo RS de Ford en comercializarse a nivel global.

Ford Focus RS (Imagen: Ford)