Jorge Navarro es uno de los tantos pilotos que ha crecido dentro de la desaparecida Cuna de Campeones Bancaja pasando por todas sus categorías. El piloto de la Pobla de Vallbona tiene a tiro de piedra el circuito Ricardo Tormo donde tantas horas pasa y ha pasado.

Siempre se ha visto al mismo Navarro luchador en todas las categorías, con hambre de victoria y de dar el todo por el todo hasta cruzar la línea de meta, sin temer a nada ni nadie. El día que anunció su entrada con Ioda, todo el paddock estaba pendiente de esta arriesgada decisión, pero después de la carrera del domingo no quedan ni dudas ni preguntas.

Consiguió ganar con autoridad, firmeza, determinación y lo más destacado: desbancar a Honda y a Quartararo que son un binomio brillante. Logró vencer con cabeza, concentrándose en mantener el ritmo para que Fabio no lo cazara. Hizo, sin duda una carrera inteligente, pero también devolvió la alegría al Team Machado que hacía unas cuantas temporadas que no tenía a un piloto luchando por ganar un campeonato.

Hizo sonreír a Ioda regalándole una victoria muy importante, dándoles la señal del buen camino que están siguiendo, pero también sirvió para darle un toque a Honda demostrando que él está aquí y ha venido para quedarse bastante tiempo. No va a ser de extrañar verlo de nuevo en el eslabón más alto del podio dándole guerra a Quartararo.

Su futuro más próximo, que se sepa, es acabar esta temporada el FIM CEV Repsol dentro Team Machado. Suenan campanas como posible sustituto de Livio Loi en el Marc VDS si este no mejora sus resultados en las próximas citas del campeonato. No es de extrañar que si sigue a tan alto nivel, los equipos del mundial de Moto3 empiecen a tocar a su puerta de cara a la próxima temporada. Es el único piloto de momento capaz de plantarle cara a Quartararo: la revolución de Jorge Navarro.

FOTOS: fimcevrepsol

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