La vuelta de vacaciones del FIM CEV Repsol no ha cambiado el orden jerárquico de la categoría de Moto2. Xavi Vierge y Edgar Pons siguen destinados a jugarse el título hasta la última carrera de la temporada. En esta ocasión, en Albacete y sobre una pista que, al principio de la carrera, no estaba en perfectas condiciones, fue el piloto valenciano el que se anotó su segundo triunfo del año para recortar cinco puntos al líder del campeonato, Pons, que fue segundo.

Ambos habían demostrado este fin de semana, como en casi toda la temporada, que estaban un paso por encima del resto, y lo manifestaron desde que el semáforo se apagó. El arranque de la carrera fue muy rápido, con un Vierge con las cosas muy claras y con confianza para exponer un ritmo difícil de seguir. Sólo Edgar Pons, sólido líder del campeonato, pudo seguir el vuelta a vuelta que marcaba Vierge.

Vierge sigue sin depender de sí mismo para ser campeón

Pons sufrió en algún momento a rueda de su rival, llegando a hacer la goma, pero se mantuvo firme hasta que en la vuelta 14 pasó a la acción. Se cansó de estudiar las trazadas de Vierge y se dispuso a tirar. No pudo escaparse y Vierge no perdió los nervios. Se sabía más fuerte que su rival y abrió las hostilidades a falta de poco más de dos giros. En dos curvas se sobrepasaron y fue el valenciano el que salió mejor parado. Pons, ante el ritmo y la solidez que estaba mostrando Vierge, decidió conformarse con un segundo puesto que le mantiene líder del campeonato.

La caída que sufrió Vierge en Barcelona podría ser la clave del desenlace del campeonato. Es lo único que desnivela ese duelo Pons-Vierge por el título de Moto2. A falta de de cinco pruebas, que se disputarán en octubre y noviembre, el piloto de Targobank no depende de sí mismo para ser campeón. Si Pons acaba todas las carreras en segunda plaza, ganará el campeonato. Ese es el gran hándicap para Vierge.

La lucha por la tercera plaza fue atractiva en las últimas vueltas. El sudafricano Steven Odendaal volvió a subir al podio, consolidándose en el tercer puesto del campeonato, al batir a Alan Techer, que rodó tercero en casi toda la prueba, y a Luca Marini. Alejandro Medina, que realizó una excelente salida, no pasó de la sexta posición al no aguantar el ritmo de sus compañeros de viaje en la disputa de la última plaza del cajón.

Eric Granado no pudo mantener su estado de forma en carreras precedentes y no pasó de la séptima plaza, mientras que Marcos Ramírez fue el mejor de su categoría, al finalizar decimocuarto con una Superstock. El andaluz afronta desde ahora un nuevo reto en Moto2 en un campeonato en el que ya brilló con luz propia en Moto3.

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