Sam Lowes, vigente campeón de Supersport, ha hecho su aparición en MotoGP con la impetuosa necesidad de acabar con un tópico cada vez más acuciado dentro del gran circo del motociclismo. Todo piloto que decidía emprender el viaje desde SBK o Supersport, nunca terminaba por despuntar en la máxima competición del mundo de las dos ruedas, salvo contadas excpeciones. En su caso, Lowes llega a Moto2 tras completar una fabulosa temporada en la que batió a Kenan Sofouglu, uno de los muchos ejemplos que podemos catalogar como talentos que a la hora de hacerse grandes en el mejor escaparate del mundo, terminan por volverse pequeños. 

El británico es una de las incorporaciones más atractivas con las que podremos contar este año. Su fichaje por el equipo de Luca Boscoscuro, el Speed Up Factory, supone la oportunidad de que un nuevo corredor del país anglosajón se una a la armada que se está conformando con pilotos como Carl Crutchlow, Bradley Smith o Scott Redding. Por otro lado, se sabe que la Speed Up es una moto complicada de manejar al lado de las Suter y Kalex, y que esto añade más dificultad al desafío que Sam Lowes tiene por delante. 

Pero el de Lincoln ha comenzado su pretemporada generando buenas sensaciones a su alrededor. En los test de Valencia sorprendió con lo cerca que estuvieron sus tiempos de los hombres más rápidos. Buenos síntomas que ha ido reafirmando en Jerez y Almería respectivamente. Sin embargo, en el trazado almeriense esta progresión ha sufrido un parón en seco. Durante la jornada de test de Moto3 y Moto2 del día de ayer, Lowes sufría una aparatosa caída en la que, además de dislocarse su hombro, se fracturaba su clavícula derecha. 

Un importante contratiempo que pone el freno a los intentos de Lowes por conocer más y mejor la Speed Up, pero que no ha supuesto ningún jarrón de agua fría para el piloto. En su cuenta de Twitter se puede ver, además de su decpeción por la caída sufrida, una gran ilusión por seguir probando su nueva montura y de que el parón invernal concluya para poder volver a subirse a su Speed Up. 

Respecto a su lesión, Lowes fue operado hacia las 22:00 horas de ayer en un hospital de Almería. En la intervención se le introdujo una placa para soldar el hueso dañado, junto con una serie de tornillos para agarrar correctamente la articulación. El plazo de recuperación será de unas 4 semanas, por lo que volveremos a ver al bueno de Sam totalmente recuperado físicamente de cara a los test que se produzcan tras el parón invernal.