Jordi Torres sufrió con la puesta a punto de su moto en el Gran Premio de Qatar. Sin embargo, en la carrera del domingo logró un asombroso octavo puesto que le dejó con sensaciones muy productivas de cara a la próxima carrera en Austin. En circuito de Texas, el piloto de Rubí no sólo tendrá que pelear contra el actual líder del Mundial Tito Rabat, sino que tendrá un duro competidor en su mismo box. Su compañero del Mapfre Aspar Team, Nico Terol, ya venció el año pasado en el GP de las Américas y se lo pondrá todavía más difícil a Torres.

El catalán, pese a todo, espera pelear por los puestos de cabeza el próximo domingo y mejorar los resultados obtenidos en Losail. “Estoy convencido de que nuestra moto será muy competitiva allí. No como en Qatar, donde nos costó encontrar la mejor puesta a punto”, recordó. Jordi Torres también aseguró que la mejor fuente de información la tienen en su propio equipo, pues afirmó que “tiraremos de los datos que tenemos del año pasado y, si no, usaremos los de Nico, que para eso fue el vencedor del curso pasado en Austin”.

El número 81 del Mundial de Moto2 no ocultó su optimismo. “Comprobando los resultados del año pasado, el de las Américas es un circuito que se nos tiene que dar bien necesariamente. Nico completó una carrera brillante y encontró una puesta a punto genial”, recalcó el catalán. Torres añadió que espera pasarlo bien sobre la moto, aunque teme por el diseño del trazado. “La pista americana es muy divertida, sobre todo algunas de sus curvas, pero tiene un punto negativo. La recta trasera tan larga, que nos perjudicará un poco respecto a los pilotos más ligeros”, lamentó. Texas tiene la recta más larga del Mundial y a ella se accede después de una curva cerrada que obliga a los pilotos a incrementar su velocidad en muy poco tiempo. Jordi Torres sabe que ahí puede estar su punto débil.

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