Takaaki Nakagami logró el pasado fin de semana en el Gran Premio de Holanda su primera victoria en el Mundial de Motociclismo. Hay que remontarse a 2010 para encontrar la última victoria de un piloto japonés en el Mundial. Fue la del malogrado Shoya Tomizawa, quien cruzaba primero la línea de meta en la carrera inaugural del Mundial de 2010 de Moto2, en el Gran Premio de Qatar

FOTO: Idemitsu Honda Team Asia

Con esta primera victoria, el piloto del Idemitsu Honda Team Asia se ha convertido en la gran esperanza del motociclismo japonés después de años sin que ningun piloto nipón destaque.  

Los 90, época dorada

El motociclismo japonés vivió su época dorada en los años noventa con pilotos como Youichi Ui, Tetsuya Harada, Kazuto Sakata, Takeshi Tsujimura, Haruchika Aoki, Masao Azuma o Dajiro Kato.

Tras el accidente que acabó con la vida de Kato en el circuito de Suzuka en 2003, los pilotos japoneses empezaron a perder el protagonismo del que habían gozado años atrás. Hasta que años después llegaron otros pilotos que harían revivir la esperanza del país nipón en el Mundial de Motociclismo

Ante la sorpresa de muchos, Hiroshi Aoyama se proclamaba campeón del mundo en la última temporada de la categoría de 250 cc. La temporada siguiente dio el salto a MotoGP, donde no acabó de destacar.  

Ese mismo año, en 2010, otro piloto japonés arrancaba con fuerza, convirtiéndose en el ídolo del motociclismo nipón, Shoya Tomizawa. Desgraciadamente, la mala suerte se volvió a cebar con los pilotos japoneses y Tomizawa perdía la vida en un accidente sufrido ese mismo año en el Gran Premio de San Marino

Nakagami, la esperanza

Ahora, la gran esperanza japonesa se llama Takaaki Nakagami. El piloto del Idemitsu Honda Team Asia aterrizó en el Mundial de Motociclismo el año 2008 en 125 cc en las filas del IC Aprilia, donde estuvo dos años. Después, Nakagami disputó dos temporadas el campeonato japonés de Moto2, campeonato que se adjudicó en 2011. Tras sus buenas actuaciones, el equipo Italtrans le ofreció una moto en el Mundial de Moto2, donde estuvo dos años y donde logró su mejor posición en un Campeonato del Mundo, la octava plaza en 2013, subiendo al podio por primera vez en su carrera, y logrando cinco podios en total a lo largo de la temporada (la tercera posición en Qatar y la segunda en Indianápolis, República Checa, Gran Bretaña y San Marino). Ya en 2014, el piloto japonés pasa a las filas de su actual equipo, el Idemitsu Honda Team Asia, y, tras una primera temporada bastante discreta, en 2015 volvía a subir al podio con una tercera posición en el Gran Premio de San Marino.  

Ya en 2016, el pasado fin de semana en el circuito de AssenTakaaki Nakagami lograba la ansiada primera victoria que tantos años llevaba esperando. Con un total de 78 puntos y ocupando la quinta posición en la clasificación general, Nakagami se convierte ahora en el heredero del motociclismo japonés.