No está siendo su año. Atrás queda esa agresividad que le hizo campeón en 2010, haciendo tambalear el reinado de Rossi en Yamaha. Atrás queda esa regularidad que le coronó en 2012, batiendo al mejor Pedrosa de siempre, que iba a lomos de una Honda algo superior a su Yamaha. Su último resultado, 13º en Assen, hizo saltar las alarmas sobre Jorge Lorenzo. Aquí, en Alemania, quiere empezar a disiparlas.

Lorenzo ha logrado el quinto mejor crono en la sesión clasificatoria del Gran Premio de Alemania en el circuito de Sachsenring. Se había mostrado muy competitivo durante todo el fin de semana, así que el resultado es agridulce: "El quinto puesto no es definitivamente lo que nosotros esperábamos, especialmente porque tenemos un buen ritmo y habíamos estado entre los tres primeros durante todo el fin de semana".

El piloto de Yamaha admitió que tuvo un pequeño problema durante la Q2 que le impidió mejorar sus cronos. "Las ruedas que usamos en el segundo intento no tenían tanta tracción como las del primero, así que no pudimos mejorar", dijo Jorge. "Lo máximo a lo que podíamos aspirar en estas condiciones era a ser tercero o cuarto", admitió Lorenzo.

De cara a la carrera, Jorge Lorenzo se muestra algo más optimista. "Será una carrera muy larga. La primera vuelta será muy importante, porque es muy difícil adelantar en este circuito e intentaremos conseguir otro podio", asegura Lorenzo. "No tenemos mal ritmo así que ya veremos si podemos estar con los pilotos de delante", concluyó el mallorquín.

Foto: Yamaha MotoGP