La temporada 2013 fue su año debut en MotoGP, Andrea Ianonne subía a la máxima categoría a lomos de una Ducati con el equipo Pramac Racing. Empezó la temporada con buen pie quedando noveno en el Gran Premio de Catar. Además, logró puntuar en todas las carreras terminadas, incluso llegó a hacerse con el quinto lugar en Valencia. Por otra parte, el peor resultado fue en Japón, en el circuito de Motegi, donde consiguió sumar dos puntos y un decimoquinto puesto. Además, ese año no llegó a clasificar hasta en seis ocasiones; dos de ellas fue a causa de una caída ocurrida en Sachsenring durante los últimos libres. Esta caída le provocó una fractura en el cuello del húmero, además de diversos derrames y hematomas; como consecuencia se vio impedido para ni siquiera presentarse a esa carrera ni a la siguiente, que se celebró en Laguna Seca.

Sin embargo, este año el piloto italiano se ha unido realmente a la Ducati y está disfrutando de esta segunda temporada consiguiendo muy buenos resultados, por ello ha despertado tanta admiración. A pesar de que el año pasado no fuese tan bien como él esperaba, desde que empezó éste no ha parado de intentar superarse. Una muestra de ello es que ha conseguido rebajar sus marcas y quedar en mejor posición que el pasado año en todas las carreras salvo el da de Catar, que bajó una posición (quedó décimo) y en Jerez, que desde su llegada a MotoGP no ha sido capaz de clasificarse, ambas por caídas. También cabe destacar que en las nueve carreras que ya disputadas, Iannone ha logrado sumar más puntos que el pasado año.  

No solo ha cambiado su estilo de pilotaje, con casi 25 años, el piloto italiano se muestra mucho más maduro lo que le permite estar más receptivo a los cambios de estrategia y por supuesto, marcarse nuevos desafíos, como el llegar al podio. Además, el equipo Pramac Racing ha conseguido mejorar la Ducati, haciéndola más veloz y todo esto en conjunto no sirve más que para hacer de Iannone un piloto listo para colocarse entre las posiciones más altas. Sobre este tema, el de Vasto lo tiene claro: “Conseguir un podio en MotoGP es realmente muy difícil, los pilotos de cabeza son muy fuertes y tanto las dos Honda como las dos Yamaha oficiales son muy competitivas, pero tanto el equipo como yo estamos trabajando para conseguirlo y creo que en un futuro próximo será posible".

Esto lo prueba no solo la buena racha que está teniendo, que le ha servido para clasificarse siempre entre los diez primeros puestos, sino que también lo prueba las ganas que tiene de pelear verdaderamente por conseguir la mejor posición, que hasta ahora es la quita que consiguió en Sachsenring, una buena manera de terminar esta primera parte del Mundial. Otro acto de superación ocurrió en Mugello, donde todo estaba a su favor: un piloto italiano, con una moto italiana, en un circuito del mismo parecer. A esto, debe unirse el nuevo motor que proporcionó Ducati, que le hizo “volar” sobre ella, tanto es así que llegó a marcar 349.6 km/h en la recta del circuito, haciéndose con el récord de velocidad de la pista. “Fue fantástico, fue una gran sensación pero no fue nada fácil porque controlar la moto a esa velocidad es muy complicado, pero este año en Mugello mi moto era fantástica con el nuevo motor que me facilitó Ducati. Conseguirlo me hizo muy feliz”, comentó el piloto vastesi.

Durante el World Ducati Week, (un evento organizado en el circuito de Misano durante tres días, donde fans y los equipos y pilotos Ducati se reúnen para correr por la pista, probar nuevas alternativas y simplemente gozar de un ambiente motero) Iannone valoró realmente el progreso tanto como de su equipo y moto como de él mismo con respecto al año pasado: “Estoy muy contento porque he mejorado en muchos aspectos respecto a la pasada temporada y eso es muy importante para mí, ya que era el objetivo que me había marcado”.