Álvaro Bautista y el equipo Honda Gresini aterrizan en el siempre divertido circuito de Motorland Aragón. La tercera prueba en suelo español de la temporada tendrá el orgullo de ser la carrera número 800 de la categoría reina de MotoGP.

Y es que sin duda, el ambiente que se vive en cualquiera de las pruebas disputadas en territorio nacional es indescriptible. Por si no fuera poco, el equipo Gresini encara esta prueba con el objetivo de intentar que sus dos pilotos entren dentro del top ten, cosa que aún no han conseguido en ninguna cita del calendario.

El piloto español rozó el podio en el pasado Gran Premio de Aragón, prueba que finalmente terminó cuarto. Bautista, que sigue sin poder sacarle el máximo rendimiento a su moto, espera poder ofrecer a su público una buena carrera. “Estoy muy motivado, el equipo está en busca de una solución que nos haga más rápidos y algo que me ayude a estar más cómodo sobre la moto. Además, el apoyo de los aficionados, de mi familia y amigos seguro que será de gran ayuda”.

“Aragón es un circuito muy especial, se caracteriza por tener unas curvas muy rápidas con espacios muy estrechos y con una recta muy larga”, analiza Bautista. “Estamos luchando para mejorar cada día, pero tenemos un montón de problemas. Espero que el ambiente de estar en casa, de estar en España nos ayude y podamos encontrarnos a gusto sobre el asfalto”.