Pol Espargaró está listo para afrontar el ecuador de la "gira asiática" que vive el Mundial de Motociclismo en su recta final. El piloto llega a uno de sus circuitos talismanes con el objetivo de lograr finalizar entre los seis primeros en una carrera que promete ser muy entretenida y al rededor de un entorno natural incomparable.

"Estoy muy ilusionado con el Gran Premio de Australia que es en realidad uno de mis circuitos favoritos en el calendario, y estoy ansioso por ver lo que puedo hacer con la Yamaha de MotoGP", comienza apuntando el 44 que no puede reprimir sus ansias de empezar a rodar cuanto antes y es que, llega con unos recuerdos más que excelentes de las pasadas temporadas ganando dos años seguidos en Moto2.

Fuente: TEAM TECH 3

"Siempre me ha gustado esta pista"

Y es que, el de Granollers no esconde su ídilio con el trazado australiano que le ha regalado muchos de sus mejores recuerdos mundialistas: "Siempre me ha gustado esta pista y he ganado dos veces aquí en las dos anteriores temporadas, el año pasado después de haber sido mi mejor carrera hasta ahora. En cuanto al circuito en sí, me gustaba aún más cuando no habían baches, pero aún así es fantástico y siempre es divertido."

El trazado australiano es uno de los más bonitos de todo el campeonato y cuenta con un entorno espectacular además de el gran número de aficionados que reciben el mundial con los brazos abiertos año tras año y hace que los pilotos se sientan como en casa: "Phillip Island es realmente único y diferente a cualquier otro circuito. Me encanta todo de este GP: la pista, la ubicación, el paisaje y Australia en general. Todo eso hace que sea un gran evento con una base super fan. Lo siento como una quinta carrera de casa para mí, así que realmente no puedo esperar."