La temporada 2014 del Mundial de Motociclismo llega a su fin. Este fin de semana se celebra el último Gran Premio en Valencia, en el circuito Ricardo Tormo. Se trata de la última carrera en la que el equipo Forward Racing tenga en su estructura al español Aleix Espargaró y al sanmarinense Alex de Angelis, quienes serán sustituidos por el alemán Stefan Bradl y el francés Loris Baz. Lo que no cambiarán serán las motos Forward-Yamaha que tantas alegrías le han aportado al equipo.

Aleix Espargaró, a excepción de los últimos dos Grandes Premios de Australia y Malasia, dónde no pudo concluir por impactar contra otros pilotos, ha realizado una de las mejores temporadas en la categoría reina que se le recuerdan. Además de haber conseguido durante este curso la pole en el GP de Assen y la segunda posición en el GP de Aragón, el de Granollers logró pasar cuarto por la línea de meta en el GP de Qatar y de los Países Bajos.

Este domingo, el mayor de los Espargaró vuelve a casa con ganas de agradecerle al equipo, delante de la afición española, todos los momentos vividos en este año tan bueno para ambos: “Espero poder terminar la temporada con un buen resultado para agradecer a todo el equipo Forward Racing todo este año lleno de satisfacciones y buenos resultados que nos han permitido sobresalir”, explicaba el piloto.

El 41, que la temporada que viene seguirá en MotoGP de la mano de Suzuki junto al recién llegado de Moto2, Maverick Viñales, se despide del curso 2014 en un circuito que, a pesar de no ser de sus preferidos, tiene la belleza de ser en casa:. “El Circuito de Valencia es realmente pequeño y sinuoso, por lo que no se trata de uno de mis circuitos favoritos por su trazado, pero siempre es bonito correr en España delante de mis aficionados, porque el ambiente es precioso y festivo, siempre te animan de forma especial”, declaraba Espargaró.