Con la ilusión y ganas que le caracterizan, Pol Espargaró aterrizaba una temporada más en el Gran Premio de Qatar en busca de corroborar lo visto en los test de pretemporada. Las sensaciones no eran las mejores, y el menor de los Espargaró se tenía que conformar con la novena posición, justo por detrás de su compañero de equipo y dos puestos por delante de su hermano, Aleix Espargaró.

"No nos aclaramos y no hicimos funcionar bien el control de tracción"

Dejando de lado el noveno puesto logrado, Pol no esconde todos los problemas sufridos en esta primera carrera. "Ha sido un fin de semana complicado para nosotros. Casi perdimos los dos primeros días enteros y en el tercero encontramos algunas mejoras, e incluso en el warm up me sentí muy bien. Aunque arrastramos un problema de electrónica durante todo el fin de semana, no nos aclaramos y no hicimos funcionar bien en ningún momento el control de tracción", comentó ante los medios.

Para terminar, Pol Espargaró asume que una noveno puesto no es lo que esperaba, por lo que no está contento. "Evidentemente, no estoy contento, porque este no era mi objetivo. Ahora tendremos que trabajar para solucionar estos problemas de cara a la siguiente carrera en Austin para poder aprovechar el fin de semana desde el primer entrenamiento", concluyó.