Jorge Lorenzo llega a Francia después de haber conseguido su tan ansiada primera victoria de la temporada. De los cuatros grandes premios, el piloto ha conseguido ser cuarto en los Grandes Premio de Qatar y Las Américas, quinto en el de Argentina y primero en el de Jerez, que también supuso su primer podio de este curso.

El piloto mallorquí vuelve un año más al Circuito de Le Mans, un trazado que le gusta tanto a él como a su equipo: "Normalmente solemos estar condicionados por el tiempo meteorológico, pero es un circuito que me gusta y donde Yamaha ha conseguido buenos resultados en el pasado, así que estoy confiado en hacer un buen trabajo allí". Lorenzo se enfrenta a este gran premio con mucha motivación, su estrategia esta temporada es ir poco a poco y actuar conforme vayan saliendo los resultados: "Me siento feliz después de haber ganado en Jerez. Ahora estoy impaciente por rodar en Le Mans, un circuito diferente a Jerez. No estoy pensando en el campeonato, solo pienso en el día a día, giro tras giro e intentando rodar lo mejor que puedo y disfrutando cada sesión".

Uno de los factores más importantes del Gran Premio de Francia suele ser las condiciones metereológicas: "Menos mal que el tiempo es bueno, pero en Francia nunca se sabe que va a pasar!". "De todas maneras voy a hacerlo lo mejor que pueda, sin importar el tiempo que haga", ha declarado Lorenzo.