Dani Pedrosa está de nuevo en el paddock del mundial de motociclismo. El piloto de Honda sorprendió nada más acabar la carrera en Qatar con el anuncia de una retirada temporal después de resentirse de problemas en el antebrazo debido al síndrome compartimental. El español pasó por el quirófano y se perdió las carreras de Austin, Argentina y Jerez.

Durante su ausencia, hubo muchos rumores sobre una posible retirada o sobre la posibilidad de que había roto relaciones con Honda. Sin embargo, desde el equipo siempre se le respaldó y lo recibió con los brazos abiertos al llegar a Le Mans, trazado que ha visto ganar a Pedrosa hasta en cuatro ocasiones.

En la primera toma de contacto tras la lesión, Pedrosa se lo tomó con calma. El tricampeón del mundo acabó décimo tercero en el primer libre, mientras que en el segundó mejoró sus prestaciones para finalizar el día en séptimo lugar, a solo medio segundo del mejor registro Bradley Smith.

Pedrosa explicó que le fue complicado volver a encontrar las sensaciones después de tantos días sin subirse a la moto: "El primer día después de mucho tiempo sin pilotar ha sido un poco difícil, también lo ha sido encontrar las sensaciones en la pista y acostumbrarme de nuevo a la velocidad y a los neumáticos".

Como todos los pilotos, siempre se está pensando en progresar y Pedrosa ya está centrado en seguir dando pasos adelante durante el fin de semana: "Esta pista no es del todo fácil cuando hace frío. Pero poco a poco hemos ido avanzando y por la tarde ha ido mejor, aunque me ha faltado un poco de ritmo. Esta noche intentaré descansar el máximo para recuperar energía para mañana".