Marc Márquez activa el modo remontada

Marc Márquez todavía sueña con ser campeón. El piloto de Cervera llegó a la cita de Indianápolis a 65 puntos del líder, Valentino Rossi, y a 52 de Jorge Lorenzo. Nadie, en toda la historia del Mundial, consiguió remontar semejante diferencia. Pero para Márquez no existen las negaciones en el mundo de las dos ruedas. El catalán tiró de una calma nunca vista encima de la moto 93 y batió a Lorenzo a tres giros del final. Márquez abandona Estados Unidos a 56 tantos del primero y aun es capaz de hacer una auténtica machada.

Un adelantamiento para ganar

La carrera empezó con el guion esperado. Márquez partió desde la pole, pero ya en la primera curva fue Lorenzo quien lideró el grupo. Detrás de ambos se colocó Pedrosa, mientras Rossi saltaba del octavo al sexto lugar. Tanto Lorenzo como Márquez imprimieron un ritmo altísimo. Giraron en 1:32 altos desde el inicio y Pedrosa no pudo hacer nada por engancharse a sus compatriotas en la lucha por el triunfo. Rápidamente se quedó a un segundo. Hizo un amago de recortar la diferencia, pero fue perdiendo paulatinamente hasta quedarse a unos metros insalvables.

La prueba discurrió sin grandes movimientos. Lorenzo y Márquez calcaban prácticamente el tiempo giro a giro. Solo la lluvia, que apareció esporádicamente, y un susto de Márquez pudieron cambiar el destino del Gran Premio. Pero ninguno de los dos pudo esta vez con Márquez. Llegó a perder medio segundo con Lorenzo, pero los recuperó con una facilidad pasmosa.

Quinta victoria seguida de Márquez en Indianápolis, la novena en Estados Unidos

Entraron en la parte decisiva y era complicado vislumbrar qué podía ocurrir. En juego no solo estaba el triunfo, sino que un error podía condenar a ambos en el campeonato. A tres giros del final Márquez lanzó su ataque. Rebasó a Lorenzo a final de recta y dio unas vueltas perfectas. Imposible para el de Yamaha. Se pegó a su rueda, pero en el último giro vio como Márquez se le distanciaba. Tercer triunfo del año para el de Cervera y victoria 700 de Honda en el Mundial.

Rossi se lleva la batalla del podio

Rossi aceptó antes de la carrera que la guerra de Indianápolis estaba perdida, pero debía minimizar los daños. Tras hacer una buena salida, se deshizo sin dificultades de Smith y Iannone. Por entonces se encontraba prácticamente a dos segundos de Pedrosa. Sin embargo, se sacó unas décimas que no había encontrado en todo el fin de semana y fue recortando metro a metro hasta colocarse tras el colín de la Honda 26.

El de Yamaha lanzó su primer golpe a diez vueltas del final. Parecía que podía abrir hueco respecto a Pedrosa, pero el español mostró un gran ritmo con el neumático usado. Cuatro giros después, la Honda rebasaba de nuevo a Rossi. La lucha por el podio estaba servida. Pedrosa cogió unas décimas de ventaja, pero cometió un error en la entrada de la curva diez y se vio adelantado nuevamente por Rossi.

El tercer escalón del podio se jugó en el último giro. Pedrosa pasó por delante en la primera curva, pero a Rossi solo le valía ser tercero. Tiró de frenos en el segundo viraje, se puso en paralelo con la Honday cerró el camino de Pedrosa. Ambos hicieron una vuelta al límite y Rossi ganó la pelea por solo una décima de ventaja. A pesar de verse superado por sus dos rivales del campeonato, deja Indianápolis con nueve puntos de ventaja sobre Lorenzo.

Iannone, el primero de los mortales

Con las Honda y las Yamaha en otro mundo, había que ver quién quedaba tras ellos. Desde la salida Andrea Iannone tomó el quinto lugar y no dejó que nadie se lo quitara. Bradley Smith le plantó cara, pero le faltaron tres décimas para batirlo. Pol Espargaró concluyó en el séptimo lugar y perdió nuevamente la batalla con su compañero de equipo, aunque la ganó a la Honda satélite de Crutchlow. Dovizioso tuvo otra carrera para olvidar y finalizó en novena plaza tras sufrir una pequeña salida al inicio de la carrera. Danilo Petrucci completó las diez primeras plazas con la Ducati satélite.

Clasificación completa

Clasificación general

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