La Décima es eso en lo que todos los tifosi sueñan desde que, bajo los focos del circuito de Qatar, comenzara la temporada. Poco se le pude reprochar al mejor Valentino Rossi de las últimas temporadas en MotoGP: poles, victorias, duelos que pasar a la historia del motociclismo, grandeza, liderazgo y una infinita lista de cosas que están haciendo que el 46 vuelva a estar en la senda de la décima. Pero el liderazgo, aunque ambos empatados a puntos, está en manos de la otra parte del box, de la parte de Jorge Lorenzo que volvió a ser líder desde 2013 gracias al número de victorias logradas esta temporada.

En este mar de alegrías, el italiano necesita matizar y mejorar algunos aspectos para frenar a un 99 que también está viviendo una grandísima temporada en la categoría reina. Y como justiciero al título parece que tendrán a un Marc Márquez que está a verlas venir y como ha afirmado, tiene mucho que ganar y poco que perder. Ha vuelto el duelo que hacía años que no vivían dentro del equipo Yamaha y con él, los capos han afirmado que no se vivirán aquellas tensas carreras como en 2009: los pilotos han cambiado, la relación es muy buena y el pasado está olvidado porque toca trabajar por el futuro. 

¿Qué le falta al 46?

Centrados en esta línea y repasando las carreras disputadas hasta el momento. Il Dottore sabe que debe mejorar y dar algunos pasos hacia delante para llevarse finalmente la corona. Una asignatura pendiente del italiano son las sesiones clasificatorias. El italiano no acaba de conseguir que le salgan perfectas y de ellas depende algo tan importante como la posición en parrilla. Una de sus asignaturas pendientes son las clasificaciones Aunque siempre se ha dicho que es un piloto de domingo y que siempre termina luchando por la victoria y las posiciones de podio. Lo avalan los 11 podios consecutivos esta temporada con finales luchados, carreras perfectas y otras más amargas. Necesita salir siempre desde prima línea y como mucho de segunda para llegar ya a la primera curva colocado en cabeza y batallar por la victoria.

A Rossi, tras ver a Lorenzo como salió y no dejó la primera posición en Brno, se le ha puesto la mosca tras la oreja ya que como él afirmó, no le vale solo con hacer podios, necesita y deberá quedar por delante de Lorenzo puesto que vienen circuitos más favorables al español y donde puede repetir carreras como la de Brno o Jerez. Debe entrenar sin descanso y hacerse muy fuerte porque las siete últimas carreras no van a ser nada fáciles y con ellas más allá de lo que pase dentro de los circuitos también pueden entrar en juego las declaraciones, ruedas de prensas o la presión del foco mediático sobre ellos.

Arriesgar pero sin cometer errores es otro de los desafíos que tiene por delante Il Dottore. Deberá arriesgar e intentar no cometer errores En la República Checa, una mala salida fue ciertamente decisiva para el desarrollo de la carrera aunque él no tuviera el mismo ritmo que Lorenzo y Márquez pero a partir de ahora no se puede permitir ni un mínimo error puesto que serán puntos a favor del contrincante. Deberá ir a por todas, asumiendo riesgos y sabiendo lo que puede ganar y perder porque si tiene algo claro es que debe quedar por delante de sus rivales y eso no va a ser fácil. 

No saben por el momento el papel que pueden jugar pilotos como Márquez o Pedrosa en el desenlace final porque ellos trabajarán para llevar victorias a su fábrica y quizás, sus posiciones sean determinantes y ejerzan de árbitros para el campeonato. Su mejor aliado será todo aquel que se interponga a su favor y le haga ganar puntos respecto a Lorenzo. 

La última asignatura que deberá aprobar el 46 será el título. Su última corona mundialista es un sueño que puede hacerse realidad en 3 meses, porque parece que el desenlace final llegará hasta la cita final en el circuito Ricardo Tormo donde delante de los miles de aficionados que año a año se desplazan hasta allí, se cierre la temporada 2015. Ganar significaría confirmar que aún queda mucho Rossi para dar guerra y reafirmaría que está para ganar y cuando no pueda hacerlo no seguirá. La batalla se servirá en 7 carreras donde nadie querrá perder y solo uno podrá ganar.