La construcción del circuito que se quiere realizar en Blaenau Gwent, una ciudad al sur de Gales, ha dado esta semana un gran paso adelante. El trazado debería haber acogido esta temporada el Gran Premio de Gran Bretaña de MotoGP, pero debido a unos temas administrativos, fue el Circuito de Silverstone el encargado de celebrar esta cita mundialista.

Michael Carrick, CEO de Valleys Development Company ha querido acordarse de todas aquellas personas y entidades que han apoyado esta idea: "Nos gustaría dar las gracias a las administraciones locales, miembros de la Asamblea de Gales y a la comunidad local que han apoyado el proyecto a lo largo del proceso de planificación hasta este punto".

Este proyecto va a suponer un desembolso de 449 millones de euros y ocupará una superficie de 330.000 metros cuadrados. Carrick, ha hecho énfasis en todos los beneficios que aportará este nuevo trazado: "El Circuito de Gales tiene la capacidad de generar miles de oportunidades de empleo, atraer mayor inversión a largo plazo y proporcionar la regeneración en Blaenau Gwent y Gales del Sur". La necesidad de una nueva calificación para los terrenos ha sido la culpable del retraso en la construcción, pero una vez superado este último requisito administrativo, se espera que en poco tiempo se den a conocer públicamente los plazos detallados de la construcción. 

De momento, el Circuito de Silverstone volverá a celebrar el Gran Premio de Gran Bretaña la próxima temporada, ya que el Circuito de Gales seguirá en construcción. Tras una importante inversión, el trazado británico se convirtió en uno de los más rápidos del calendario de MotoGP. En sus más de 60 años de historia, este recorrido se ha ganado el reconocimiento por ser uno de los principales recintos dedicados a los deportes de motor.