Pilotos como Kenny Noyes, Álvaro Bautista, los hermanos Márquez, Brad Baker, Xavi Forés, Alex Rins o Aleix Espargaró coparon la pista del SuperPrestigio en su primer año. Desde los primeros entrenamientos, la acción fue frenética y comenzaba a augurar el porvenir: la guerra estaría a la orden del día y nadie quería ser eliminado en las rondas previas a la final. El Palau Sant Jordi acogió en enero de 2014 esta competición en pista de tierra llenando sus gradas para ver a las estrellas de las dos ruedas, compitiendo por la victoria.

El americano Brad Baker y el anfitrión Marc Márquez marcaron la batuta en una primera edición donde una caída sentenció el título. La Superfinal contaba con un total de 12 vueltas y estaría compuesta por los pilotos que lograran pasar las diferentes rondas eliminatorias que se iban disputando en la pista barcelonesa. Un total de 8 pilotos fueron los protagonistas de la gran final, dos de ellos fueron cogidos de la última repesca mientras tres más provenían de la categoría SuperPrestigio y los tres restantes de la Open. Los casi ocho mil espectadores que ocupaban las gradas del recinto, vibraban vuelta a vuelta.

Brad Baker, Tito Rabat, Kenny Noyes, Aleix Esparagaró, José Pedro Gómez, Merle Scherb, Dani Ribalta y Marc Márquez eran los protagonistas de la final. Desde el inicio, Baker y Márquez llevaron el dominio dejando atrás a sus rivales. Pasadas y más pasadas con adelantamientos que rozaban el límite y desafiaban a la ley de la gravedad hicieron levantar a los asistentes hasta que en la vuelta 9, la carreras del 93 se truncó. En una de las derrapadas, ambos pilotos se tocaron y el de Cervera perdió el control de la moto yéndose por los suelos a tres vueltas del final. Su carrera parecía acabada y es que tuvo que ver como el campeón de América de DirtTrack se coronaba campeón seguido por Tito Rabat y Kenny Noyes.

“Siento mucho haber tenido ese contacto con Márquez en la SuperFinal, ha sido un gran mano a mano y me gustaría volver a repetir esta experiencia en casa e invitar a Marc a la Media Milla el año que viene”, declaró el piloto de KTM tras proclamarse campeón y es que ese toque fue esencial para el desenlace. Por su parte, Márquez se quedó con la gran experiencia vivida: “Ha sido una bonita lucha con Baker. He aprendido muchas cosas. ¡Espero que este show se repita el año que viene!”. Este fin de semana se disputará en el Palau el III SuperPrestigio de Barcelona con la posibilidad de vivir una nueva batalla entre el americano y el español dado que en la segunda edición se vio truncada debido a la lesión de Baker. 

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