Minutos antes de salir a pista estaba Marc Márquez en su box, vestido ya con el mono, cuando se le acercó Nakamoto, vicepresidente de HRC: "Por favor acaba la carrera". Quería ver a su piloto en el podio, no rodando por la grava, así que el de Cervera, más prudente, le hizo caso. Se aseguró el tercero para acabar en el podio y así, como hizo, asegurarse el liderato. Con esas, innato en su condición, empujó al máximo. Tanteó los límites, más difícil con los Michelin que con los Bridgestone, y cometió hasta varios errores, como el de la curva ocho, una caída que no sabe ni cómo salvó con el codo.

"He sufrido y me he aburrido"

Ese fue el aviso para pensar con cabeza. Rodó más lento, aunque confesó que ayer los tiempos salían porque andaba forzando. Hoy, con más calor, le resultó imposible: "Sé que para todos es igual y que esto no es ninguna excusa, pero nosotros perdemos en aceleración y frenamos más tarde calentando más el neumático de delante". No le quedó otra que aguantar la carrera para que no se le acabara el neumático, tan contenido pilotó que hasta se aburrió: "He sufrido y me he aburrido. Las diez últimas vueltas han sido aburridas encima de la moto, espero que para el futuro podamos mejorar y podamos brindar a la afición unas últimas vueltas bonitas. A ver si podemos dar nosotros el paso adelante para estar con Yamaha".

Foto: Box Repsol
Foto: Box Repsol

Por eso se comparó con sus rivales, Rossi y Lorenzo, aunque asegura que siempre se vio en peor situación que en la que se está encontrando aún algo resignado: "Esperaba en las cuatro primeras carreras no descolgarme del campeonato y estoy por delante. Las carreras de Argentina y Austin nos han servido para hacer aquí una carrera que quizás sin este estado del campeonato hubiésemos acabado terceros igual. Tenemos que tener paciencia hasta que consigamos un pequeño empuje por parte de Honda para intentar ir un poquito mejor".

Mañana, con suerte, podrá avanzar otro poco, en los test previstos de la categoría reina. Van así en el box de Márquez, arreglando esto por aquí y eso por allá, pequeñas mejoras que acorten distancia con la Yamaha referencia: "Mañana es un test importante para priorizar cosas. Saber qué va bien y qué va mal, para evitar lo que sucedió ayer que tuvimos que cambiar de moto y en  el warm up probar dos motos distintas, por lo que mañana será importante para coger una buena base para circuitos de este estilo". Se acordó también del motociclismo, de la afición que rugió hoy en las gradas: "En Jerez se ha vivido un ambiente de motociclismo puro. Ha habido aplausos para todos los pilotos, sean de la nacionalidad que sea, y me siento orgulloso de la afición española que ha mostrado lo que es el motociclismo". A esa afición contó que, también, le debe resultados. Queriendo rendir sobre la Honda como tanto gusta.