Toby Price crece al mismo ritmo que la propia competición. O lo que es lo mismo, hacia arriba. Poco a poco va recortando segundos y sumando victorias, acechando en la segunda plaza de la clasificación general. Sumó hoy un triunfo reñido, aunque relajado al final, en un mano a mano con Paulo Gonçalves , aquel que conserva el liderato.

Price está imparable. Si ayer se impuso en la etapa maratón hoy lo hizo en la presente a pesar de los múltiples factores que se barajaban. La sexta etapa no era una cualquiera. Se trata de la más larga en esta edición, 542 kilómteros, lo que se traduce en la prueba de resistencia más exigente de este Dakar. Desde los primeros compases se señaló  el mano a mano que iba a mantener con Gonçalves. Si al principio fue el luso el que tiró de él, en la resolución de la prueba fue el austriaco el que se creció.

Foto: Dakar 2016
Foto: Dakar 2016

Y no fue fácil aunque lo pareció. Llegaba Price al CP3 con casi dos minutos de retraso, pero su solidez y la "ventaja" de no abrir pista le permitieron cruzar primero  la meta con un colchón de 1'12'' de ventaja sobre el piloto de Honda. Algo menos le sacó a  Matthias Walkner, 1:05", invitado sorpresa al final que también contuvo a Gonçalves. Por fortuna para este último nada se ha complicado, pues se mantiene líder en la general a 35 segundos de Price.

Hablar de la sexta etapa es hablar de la maldición del Salar de Uyuni. Un nombre en ella queda reflejado: Joan Barreda. Una avería, en una serie de problemas mecánicos, le hace volver a enterrar allí sus esperanzas de ganar el Dakar. Volvió a padecer el mayor de los males en lo que es su mundo. Hasta una hora estuvo retenido en el kilómetro 203, para reanudar la marcha y volver a ser nuevamente trastocada por problemas más tarde. Es la historia rota del favorito, el adiós a un sueño que parecía más fácil que nunca

Foto: Dakar2016
Foto: Dakar2016

Pero no fue Barreda el único que padeció. Ha sido la sexta etapa la de los abandonos. Entre ellos resuena el de Rubén Faria, con peor suerte incluso que el castellonés, obligado a abandonar por una fractura de muñeca. En la misma sintonía Iván Jakes, también de vuelta casa por una lesión de rodilla fruto de una caída. Entre todas esas dificultades, hubo alguien que creció. Fue Laia Sanz. Firmó una gran etapa, entró la décimo quinta, para subir al décimo sexto lugar en la clasificación general. Mañana habrá más y los más competitivos avisan, lo más difícil está aún por llegar. 

Quads: Victoria de Patronelli en la despedida de Casale

Suma Marcos Patronelli una victoria más. Con ella alcanza además el liderato, aventajando a su hermano en 6'39'', un buen conchón a mantener. En su alegría, y en sintonía con lo que ocurrió también en motos, se vio el abandono de uno de los grandes favoritos y máximo rival de Patronelli, Ignacio Casale. Un error en el kilómetro 369 le ha dejado fuera de esta edición, sufriendo una fractura de clavícula que no le deja otra opción que la del abandono.