Leon Haslam volverá a subirse a su Honda el próximo fin de semana en Aragón con el objetivo de olvidar los malos resultados en la primera carrera de la temporada en Phillip Island. Si bien en la segunda prueba acabó en sexta posición, el piloto británico no logró clasificarse para la primera de las carreras en el trazado australiano. Tras casi un mes y medio de parón, el circuito de MotorLand concede ahora una segunda oportunidad al piloto de Pata Honda para mejorar sus sensaciones.

Haslam ha llevado a cabo dos tests con su equipo en las últimas semanas. Tanto en Cartagena como en Jerez se centraron en revisar la electrónica de la CBR y ahora han recibido nuevos componentes para el chasis, por lo que el optimismo ha ido en aumento de cara a la prueba aragonesa. Un trazado técnico y exigente de 5.344 metros parece el mejor escenario para testar las mejoras y analizar si Haslam puede estar en el grupo que lidere la carrera.

El británico hizo balance de la primera cita del campeonato de Superbikes y recordó que “parece que ha pasado bastante tiempo, pero no recuerdo Phillip Island como un buen fin de semana para nosotros. Después de un test muy positivo, tuvimos algunos problemas con los motores de carrera”. No obstante, Haslam quiso señalar que “el equipo ha estado trabajando muy duro desde entonces para conseguir una buena base y ha realizado ciertos progresos con el control de tracción”.

Al comprobrar el trabajo llevado a cabo en Pata Honda, Leon Haslam aseguró que la moto es ahora mucho más fácil de pilotar y se mostró ansioso por rodar en MotorLand. “Tengo muchas ganas de que empiece la segunda prueba de la temporada en Aragón. Nunca he conseguido buenos resultados allí, pero Johnny (Rea) tenía un buen ritmo el pasado año, así que confío en que nuestra moto vaya bien”, comentó. Haslam demostró su confianza en la moto y recalcó que “continuaremos con el desarrollo de la Fireblade para llevarla a luchar de nuevo por los puestos del podio”.

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