Davide Giugliano llega a Imola con la moral por las nubes después del podio logrado en la segunda manga de Assen. El italiano estaba teniendo una temporada complicada, en la que no lograba colarse entre los tres primeros en ninguna carrera. Tras el resultado de Assen, llega a una de las citas de su país donde intentará regalar a los tifossi un triunfo, que sería el primero de su carrera deportiva en Superbikes.

El piloto de Ducati se mostró muy competitivo durante todo el fin de semana. Dominó la primera y la tercera sesión de libres. Al llegar a los entrenamientos clasificatorios tuvo que conformarse con la tercera posición, a 266 milésimas del tiempo de la pole de Rea y solo una milésima por detrás de Sylvain Guintoli. “La Superpole fue muy bien. Hicimos un buen tiempo, pero estoy especialmente satisfecho con mi tiempo de vuelta con el neumático de carrera en el inicio de la sesión. Por supuesto que es genial ser capaz de iniciar en la primera fila de la parrilla”, explicó el de Ducati.

A pesar del buen resultado obtenido, Giugliano no se confía de cara a las carreras y marca las altas temperaturas y los neumáticos como dos de las grandes claves en la lucha por las primeras plazas: “Mañana las carreras que seguramente será difícil, hay al menos cinco pilotos que pueden luchar por el podio. Las temperaturas también juegan un papel importante, tanto físicamente como en los neumáticos, pero será así para todos, así que estamos con mucha confianza”.