Sylvain Barrier arrancó el año con el cartel de uno de los favoritos a ser el mejor piloto EVO. Superbikes daba un giro completo a la normativa, con la creación de esta nueva categoría, semejante a las CRT que Dorna había implantado en MotoGP. BMW decidió dejar a un lado competir por las posiciones cabeceras -como hizo con Melandri los últimos dos curso- para centrarse en el desarrollo de las EVO, que coparán la parrilla en 2015. La marca alemana eligió a Sylvain Barrier para liderar el nuevo proyecto.

El piloto francés, de 25 años, aterrizaba en el Mundial de Superbikes después de haber ganado en 2012 y 2013 el campeonato de Superstock 1000. Las dos temporadas anteriores había logrado nueve victorias, 13 podios y 14 poles en un total de 19 carreras. Además, el curso anterior tuvo la oportunidad de competir en la última prueba de Superbikes en Jerez, con un duodécimo y décimo tercero como resultados. Parecía que BMW elegía al piloto correcto para asentar las bases del proyecto EVO.

Foto de familia de los pilotos días previos al inicio del campeonato | Foto: Scott Barbour - Getty Images.

Primer mazazo en Phillip Island

Pronto se vio que no era el año de Sylvain Barrier. Cinco días antes del arranque del campeonato en Phillip Island, se organizaron los últimos test de pretemporada en el propio circuito australiano. Unos entrenamientos que servían para hacer los últimos ajustes a las motos y buscar las mejores sensaciones posibles con el trazado que daba el pistoletazo de salida a la temporada 2014.

Sin embargo, Barrier tuvo un feísimo accidente en el circuito más rápido de todo el campaonato. El piloto de BMW se fue al suelo en la penúltima jornada de pruebas con tan mala suerte que se fracturó la pelvis. El francés no pudo volver a subirse a la moto y, por supuesto, tuvo que ajornar su estreno en la temporada que ya había empezado. Se vio obligado a ver las dos primeras carreras lejos del circuito.

Barrier, en uno de los test de pretemporada | Foto: World SBK.

Un accidente de tráfico lo deja en coma

Dentro del infortunio sufrido, el campeonato empezó tan pronto que hasta la segunda prueba tendrían que pasar casi dos meses. Una buena noticia para el piloto, que tendría tiempo suficiente para recuperarse de la fractura de pelvis y regresar a los circuitos. Dentro de lo malo, solo se había perdido dos carreras. Todavía restaban doce para el final del campeonato. Había tiempo suficiente para revertir la situación y devolver a BMW la confianza depositada en él.

Otro percance lastraría las esperanzas de Barrier. El francés sufrió un accidente de tráfico a las afueras de Lyon. El piloto chocó de frente contra un camión y entró en coma, donde permaneció durante unos días. Tras despertar, Barrier fue intervenido quirúrugicamente por un especialista maxilofacial después de romperse la mandíbula en el accidente. El galo pasó por un calvario los meses siguientes y se perdió los cinco Grandes Premios siguientes.

Nuevo mazazo en Laguna Seca

Afortunadamente, Sylvain Barrier burló a la muerte tras el accidente con el camión. El de BMW se recuperó de la fractura de pelvis de los test de pretemporada y de la fractura en la mandíbula. El 20 de junio, el de Lyon volvió a sentirse piloto. Regresó al campeonato en la prueba de Misano. En la primera carrera finalizó décimo quinto y en la segunda, decimoprimero para sumar los primeros puntos del año. En la siguiente prueba, en Portimao, fue más allá. Barrier entró en la Superpole 2 y firmó la décima plaza en entrenamientos. En la primera manga de Portugal, quedó décimo, luchando con David Salom por ser el mejor EVO. En la segunda carrera, bajo un diluvio, finalizó undécimo y fue el mejor piloto de su categoría.

Barrier fue el mejor EVO en Portimao | Foto: Mirco Lazzari - Getty Images.

Pasó de flirtear con la muerte a dominar las EVO en tan solo dos carreras. Sin duda, Barrier demostró a BMW que su elección fue la correcta. Laguna Seca acogió la última prueba antes de las vacaciones estivales. El piloto francés llegaba con el objetivo de repetir el resultado de Portimao. En la primera carrera fue batido por Salom y Canepa pero sumó unos puntos al campeonato. En la segunda manga, la mala suerte se volvió a cebar con él. Encaró la recta de meta en paralelo a Iddon y extrañamente se fue al suelo. Barrier fue deslizando mientras las otras motos pasaban a más de 250 km/h a escasos metros de él. Finalmente, el piloto chocó contra el muro y quedó tendido en el suelo. De nuevo salvó su vida, pero con una factura de un talón de aquiles roto. Muy barato para lo que podría haber sucedido. El incidente de Laguna Seca dejó patente que Sylvain Barrier está viviendo su particular año negro.