Este fin de semana arranca una nueva edición, la 29ª, del Mundial de Superbikes. Los cuatro meses de parón invernal han dado lugar a fichajes, dudas e incertidumbre que se acabarán, en cierta medida, cuando el sábado se apague el semáforo y de comienzo la primera carrera del año. Jerez, Aragón y el propio circuito de Phillip Island han sido los escenarios de una larga pretemporada que ha vuelto a situar a los pilotos de Kawasaki como claros favoritos al título mundial.
Todos contra Jonathan Rea
Jonathan Rea luce el '1' en su carenado tras conseguir, por fin, el ansiado título mundial que tantas veces intentó alcanzar con una mediocre Honda y que, con su fichaje por Kawasaki, todo le vino de cara. 14 victorias en 26 pruebas avalan la enorme superioridad que el norirlandés tuvo sobre sus rivales. Este invierno no ha tenido la velocidad de Sykes, pero sí ha sido el más fuerte en las tandas largas. El sábado arranca el intento de reválida de corona, algo que nadie consigue en SBK desde 1999.
Tom Sykes, su compañero de equipo, se postula como el rival a tener en cuenta para el campeón. Viene de una temporada decepcionante, con 'sólo' cuatro victorias, lejos de los registros de Rea. Su estilo de pilotaje resulta crítico con los delicados neumáticos Pirelli del Mundial de SBK, con lo que su aprendizaje en gestionar las gomas puede resultar decisivo en el devenir del campeonato.
Habrá que tener en cuenta cómo evoluciona la relación entre ambos en Kawasaki, ya que en 2015 hubo más de un roce. Ya en invierno se han disparado algunos dardos: Rea aseguró que su compañero fue el director de la puesta a punto de la moto, dejando entrever no estar excesivamente contento con este hecho. Sykes, por su parte, respondió que era "un comentario barato" y una falta de respeto hacia el trabajo realizado por el equipo durante el invierno.
No será un inicio fácil para Sykes. Nunca ha ganado en Australia y las características cambiantes del trazado de Phillip Island no benefician a un piloto que, históricamente, rinde mejor cuando tiene todo en su sitio y sin que nada ni nadie le moleste. Rea, por su parte, venció en la carrera inaugural de 2015, con lo que su confianza no se ve nada debilitada en las Antípodas.
Ducati, principal amenaza de Kawasaki
Ducati se antoja como, prácticamente, la única alternativa para el dominio de Rea, Sykes y Kawasaki. Chaz Davies fue subcampeón en 2015 y, durante este invierno, ha lanzado un mensaje de optimismo con el título como única meta. Su compañero de equipo, Davide Giugliano, es toda una incógnita, pues viene de un año difícil con dos lesiones graves. Una de ellas, precisamente en Australia. Este fin de semana se comenzarán a despejar las dudas en torno al italiano.
Superbikes celebra, además, la llegada de un campeón de MotoGP como Nicky Hayden. El de Kentucky encabeza el renovado proyecto de Honda, que tan buenas sensaciones ha dejado en pretemporada. Hayden aspira a convertirse en el primer piloto en ganar los dos principales campeonatos de motociclismo. No tendrá un compañero sencillo, ya que Michael Van der Mark viene pisando fuerte y pretende mantener la velocidad que le hizo lograr tres podios en 2015.
Otro de los atractivos de este fin de semana será el regreso de Yamaha a la categoría. La marca de los diapasones viene de ganar las 8 Horas de Suzuka con una moto similar y ha fichado, para su debut en el Mundial, a dos pilotos de un perfil muy distinto: la experiencia y capacidad de evolución de la moto de Guintoli, campeón en 2014; y la juventud y velocidad de Lowes. El británico, por cierto, suele brillar en Australia y será uno de los hombres a vigilar en el primer GP del año.
En cuanto a la representación española, Jordi Torres debuta con la nueva BMW con la que aspira a mantener el buen estado de forma de 2016. El catalán tuvo un accidente en los tests de esta semana pero podrá correr sin problemas en las carreras. Xavi Forès, por su parte, se ha ganado por fin un asiento permanente con una Ducati privada. El valenciano ya sustituyó a Giugliano en algunas carreras de 2015 con excelentes resultados.
El Mundial de SBK presenta novedades en cuanto al formato de fin de semana. Las tradicionales dos mangas se dividen en dos días: una el sábado y otra el domingo, teniendo una sesión de clasificación previa el sábado a primera hora de la mañana. Una manera de mantener activa la tensión durante, al menos, dos días del fin de semana. A partir de esta semana veremos los resultados.
Así es el circuito de Phillip Island
El trazado australiano es un escenario único en el mundo del motociclismo. Sus curvas rápidas dan como resultado la velocidad media más alta, con diferencia, de toda la temporada. Esto, y las condiciones climatológicas en las que se compite, hacen de la carrera inaugural una prueba absolutamente distinta al resto. El ganador de la carrera australiana puede no tener nada que ver en la lucha por el campeonato.
Sus 4.445 metros de longitud son testigos de 12 vertiginosas curvas, con siete giros a izquierdas y cinco a derechas. La recta de meta no es excesivamente larga, con 835 metros de longitud. Además, cuenta con varios puntos de adelantamientos clave: la curva 1, tras la recta; la curva 4, y la famosa curva 10, en la que tantas y tantas carreras se han decidido.