Tras meses, incluso años, de rumores sobre la supuesta mala relación entre la cantante sueca Anette Olzon y los demás miembros de su banda, las habladurías se han hecho realidad: el grupo de metal sinfónico Nightwish ha emitido un comunicado anunciando la marcha de la vocalista, alegando “conflictos entre la necesidad y la dirección de la banda”. La ruptura se ha realizado en mutuo acuerdo, acabando así con la carrera de Anette Olzon en la banda finesa, carrera que ha durado cinco años. A pesar de todo, no habrá interrupción alguna en la gira Imaginaerum Tour que ha llevado a Nightwish al otro lado del charco. La cantante holandesa Floor Jansen, actualmente vocalista de ReVamp y MaYan, se encargará de sustituir a Olzon en las fechas ya dispuestas.
Antes del anuncio de la ruptura, Anette Olzon ya había declarado en su blog personal que se encontraba “disgustada” con la banda, ya que no consultaron con ella lo que iban a hacer en el show de Denver, Colorado. Horas antes de aquél concierto, celebrado el 28 de septiembre, la cantante sueca enfermó por una gripe y tuvo que ser atendida en un hospital a causa de fiebres y vómitos. Al encontrarse indispuesta, con tal de no cancelar el concierto, los demás miembros del grupo decidieron contar con la ayuda de Elize Ryd (Amaranthe) y Alissa White-Gluz (The Agonist), cantantes invitadas de Kamelot, que compartía gira con Nightwish. Así, las dos vocalistas sustituyeron a Anette en el ya mencionado show, cosa que, al parecer, molestó a la sueca, ya que nadie le avisó lo que iban a hacer.
Parece que eso fue la gota que colmó el vaso, ya que se ha anunciado su salida de la banda pocos días después de lo acontecido en Denver. Cabe destacar que, hace pocas horas, tras dar gracias a los fans por el apoyo, Anette Olzon ha cerrado su blog, dando por terminado un capítulo de su vida.
La eterna sustituta
La carrera de Anette Olzon dentro de la banda sinfónica siempre ha estado acompañado de polémica. El cartel de “sustituta de Tarja Turunen” ha acompañado a Anette durante toda su trayectoria como vocalista de Nightwish. Entró en la banda en 2007, pero los antiguos fans no la llegaron a aceptar del todo y, siete años después de la salida de su antecesora, la soprano finesa Tarja Turunen, muchos aún seguían reclamando el retorno de la vocalista original a la banda.
Llenar el vacío dejado por Turunen no es tarea facil, y las críticas le han llovido por doquier. Aun así, a pesar de que muchos calificaron como “irregular” su actuación en Dark Passion Play, su primer disco con Nightwish, recibió muchos elogios gracias al segundo álbum, Imaginaerum, cuya versión cinematográfica se estrenará a finales de año en Finlandia. En este último trabajo, editado en 2011, podemos escuchar a una Anette mucho más segura de sí misma, atreviéndose con registros hasta entonces poco explorados en su voz. Un álbum, según los críticos, redondo, que podía haber servido a la sueca para consolidarse como vocalista en una de las bandas más grandes que ha dado el metal sinfónico.
Parece ser que ese sueño tendrá que esperar. Ahora, el futuro se presenta dubitativo, tanto para Anette como para Nightwish. ¿Seguirá Anette Olzon su carrera junto a otra banda? ¿Arrancará en solitario? ¿Quién será la tercera vocalista de la historia de Nightwish? Seguiremos de cerca adónde los guían sus pasos.
