Comenzó el partido en Foxborough con el ovoide en manos de los patriotas, que lo conservaron durante algo más de 5 minutos, teniendo que conformarse con un field goal de 45 yardas obra de Stephen Gostkowski, quedándose en la 9 rival, de la que retrocedieron tras ser derribado Tom Brady. Los Saints se hacían con la posesión con mucho cuarto por delante, y encadenando dos grandes pases Drew Brees, primero para Pierre Thomas y luego para Benjamin Watson, se plantaban en la 22 rival. Hacían bueno el esfuerzo materializando el touchdown, tras pase de Brees sobre Travaris Cadet, terminando el cuarto con 7-3 favorable a los foráneos.

El segundo período continuaría con una posesión a caballo de los Pats, que terminaría a la postre con el primero de los dos touchdowns que firmaría Stevan Ridley sobre el pasto del Gillette. En la primera acción, el natural de Mississippi recorría una yarda por el centro, tras un buen juego combinando la tierra y el aire, en el que Brady y el propio Ridley fueron protagonistas. El drive correspondiente al segundo touchdown de la noche para los locales comenzaría con un sack sobre el mariscal anfitrión, rehaciéndose de ello, y combinándose con Hoomanawanui y Ridley, para dejar a este último la posibilidad de correr 4 yardas y firmar así el touchdown. El descanso llegaba a Foxborough con el marcador mostrando 17-7 favorable a los Pats.

Fin del descanso y vuelta a las hostilidades sobre el pasto. Garrett Hartley saltaría al campo pasados 4 minutos para convertir un lejano field goal de 47 yardas, reduciendo así la ventaja a solo un touchdown para los de New England. El empate llegaría poco despuiés. Comenzando desde la propia 33, los Saints remontaban yardas a gran velocidad, gracias en parte al trabajo de Pierre Thomas y de Khiry Robinson. Drew Brees dejaba la ofensiva a 3 de la anotación, oportunidad que aprovecharía el mismo Robinson para anotar un nuevo touchdown, empatando así el partido. Poco duraría la alegría para los de Sean Payton, ya que Stephen Gostkowski convertía un field goal de 54 yardas para adelantar a los suyos, superando de paso al mítico Adam Vinatieri, kicker de los Colts, en número de field goals de más de 50 yardas, dejando la marca en 9.

Las defensivas tomaban el mando en el último período para detener las acometidas de ambos mariscales, sobre todo las de Brees, que intentaba llevarse el partido para conservar la racha ganadora del conjunto saint. Encontraría el premio tras 6 minutos de drive, en los que Thomas y Robinson volvían a llevar el peso de la ofensiva para los suyos. Acampaban los Saints en la 34 rival, cuando Brees bordó un pase profundo hacia el rookie Kenny Stills, para convertir un nuevo touchdown, adelantando de nuevo  a los foráneos. Garret Hartley, con un field goal de 39 yardas, ponía tierra de por medio entre ambos equipos, solo quedaba la esperanza de un touchdown para que la victoria se quedara en New England. Y llegó. Comían terreno rápido los Pats, Brady y Edelman trabajaban a destajo, y cuando quedaban 11 segundos para el final, Brady lanzó un profundo de 17 yardas para el rookie Kenbrell Thompkins, que suponía la victoria del conjunto patriota.

New England viaja hacia New York para disputar el clásico frente a los Jets la próxima semana, mientras New Orleans recibe en el Superdome a los Bills tras una semana de descanso.