Comenzaba el partido en New Jersey con el ovoide en manos de los locales. Eli Manning conduciría a sus gigantes un un largo drive, de más de 9 minutos de posesión, en el que los anfitriones deberían conformarse con un field goal obra de Josh Brown, que patearía el cuero para 35 yardas. Los Vikings tiraban por la borda el primer drive de Josh Freeman, sin conseguir de él, tendrían que esperar a la segunda oportunidad para que, tras el despeje Giant,  Marcus Sherels retornara 86 yardas y convirtiera la carrera en touchdown, termiando 7-3 el primer cuarto.

Los Giants continuaban con la posesión en el comienzo del segundo cuarto. Vikings no invertía bien sus drives, en cambio, Eli Manning quería estrenar el casillero de victorias, y lo demostró tras un pase profundo, de 24 yardas, para que Rueben Randle convirtiera el envío en el primer touchdown para los de Nueva York. Nada de acierto para ambos equipos hacia el final del cuarto. Blair Walsh intentaba un field goal de 53 yardas que no fue bueno, y Eli Manning sufría con sack a 1 minuto del final, dando al traste con la jugada, para terminar el cuarto con 7-10 favorable a los locales.

Tras el descanso, ambos equipos entraban de nuevo cruzados al partido, y las imprecisiones campaban sobre el pasto de MetLife Stadium. Primero los Giants, que veían como Rueben Randle perdía un balón tras un pateo de despeje de los Vikings. Recuperando la posesión los de Minnesota, Freeman sería interceptado por Antrel Rolle, sin mayores consecuencias a priori. Un mal retorno en el despeje Viking, con fumble incluido, dejaba a los Giants a 3 yardas del nuevo touchdown. Peyton Hillis aprovechaba la situación para anotar, tras correr 1 yarda por la izquierda, terminando asó el cuarto con 7-17.

En el cuarto y último cuarto, los Giants buscaban apuntalar la victoria, mientras lo Vikings adolecían de erráticos en sus consiguientes conducciones. A las primeras de cambio, Eli Manning conseguía dejar el cuero en la 5 rival, y volvía a la acción Josh Brown para convertir un nuevo field goal. Un nuevo retorno perdido para los Vikings, propiciaba la vuelta del mismo Josh Brown al pasto. El kicker natural de Oklahoma patearía un field goal de 36 yardas, para establecer el definitivo 7-23, que daba la primera victoria a los de la gran manzana.

Los Vikings vuelven a casa con la derrota, preparados para enfrentarse a los Green Bay Packers. Por su parte, los Giants viajan a Philadelphia para medirse ante los Eagles.