Se enfrentaban uno de los mejores equipos de la temporada, los Cardinals, con solo un partido perdido, contra el que ya es peor equipo de este año, los Raiders, que no saben lo que es ganar. El quarterback novato de los Raiders, Derek Carr, empezó la posesión para intentar poner a los suyos por delante, pero a pesar de las buenas protecciones de su línea, el de Fresno no hizo buenas selecciones de pase y hasta el final del primer cuarto no consiguió un primer down.
Los Cardinals, por el contrario si que encontraron el camino hacia la zona de anotación gracias en parte a las carreras de Ellington. Carson Palmer encontró a Stepfan Taylor, que estiró su cuerpo para conseguir el primer touchdown del partido. En el segundo cuarto la defensa de los Raiders se sobrepuso al marcador y forzaron el cuarto down. En el regreso de la patada de despeje, Carrie avanzó más de medio campo pero un pañuelo voló e hizo que no sirviera de nada. Son este tipo de errores los que hacen que los Raiders sean de forma justa la peor ofensiva de la liga.
Las diferencias aumentaron cuando Palmer pasó a Floyd para que llevara el ovoide a la zona de anotación y poner el 0-14. O los Raiders espabilaban o el partido podía acabar en una paliza considerable y efectivamente la reacción llegó en forma de touchdown gracias primero a un pase de 55 yardas de Carr a Butler, que dejó el ovoide a 3 yardas y después a McFadden que alargo el cuerpo para poner el 7-14.
Las prisas hicieron que Palmer fuera interceptado a las puertas del descanso. Pese a ser uno de los mejores equipos de la liga y contar con uno de los mejores receptores como es Fitzgerald, Arizona tiene la tercera peor ofensiva, cosa que no extraña al ver jugadas como esta. El error conllevó a un gol de campo de los Raiders con el que se llegó al descanso.
Ya en la segunda parte, Oakland recortó distancias con otro gol de campo que hacía saltar las alarmas en la banda de los Cards. El encargado de apagar el fuego fue Taylor, que corrió 4 yardas para anotar su segundo touchdown del partido. El corredor de segundo año tuvo una gran tarde, anotando por aire y por tierra. Aunque el verdadero todoterreno y mejor del partido fue sin duda Andre Ellington que lideró a su equipo por tierra, con 88 yardas y por aire con 72 yardas. De ahí en adelante, el partido estuvo totalmente controlado por el equipo visitante y nada pudieron hacer los que ya son el peor equipo de esta temporada. Un gol de campo de Catanzaro puso la puntilla al partido.
Con esta victoria los Cardinals lideran la NFC Oeste con un balance de 5-1, que les da más confianza para sus dos próximos partidos contra los mejores equipos del momento, Eagles y Cowboys. Por parte de los Raiders, pocas novedades, últimos de la liga y con un serio problema de cara a la anotación de touchdown.